Publicidad
Publicidad

En el PAN reconocen la voz autocrítica y de denuncia del "Jefe" Diego

-
sáb 15 mayo 2010 10:30 PM

A Diego Fernández de Cevallos, el Partido Acción Nacional (PAN) le debe "ser la voz de la denuncia, de la autocrítica, la figura de la determinación en tiempos de incertidumbre y de los regaños en épocas de errores".

Así es como concibe a "El Jefe" el también político Antonio Muñoz Serrano, quien se muestra consternado con la noticia de la desaparición del ex candidato presidencial, quien ha sido su mentor y amigo.

Muñoz Serrano confía en que, tras la desaparición ocurrida el viernes por la noche en el central estado de Querétaro y las huellas de violencia que la rodean, Fernández de Cevallos pronto será encontrado con bien, "porque es una figura que le hace falta a este país y al partido". 

"El PAN no sólo le debe su militancia, su trabajo incansable por la democracia, también ser la voz de la denuncia, la voz fuerte que siempre se escucha y que hace autocrítica en el partido", dice a CNN México.

Amigo personal y ex compañero de Fernández de Cevallos en la Cámara de Diputados, recuerda un par de anécdotas: Un regaño al entonces dirigente del PAN, Germán Martínez, por los magros resultados en las elecciones del 2009, y cuando le debatió a Vicente Fox que no sólo el vestir de azul es sinónimo de ser panista, "el blanco también forma parte de nuestros colores".

Con ello, explica Muñoz Serrano, Fernández de Cevallos trataba de dar una lección de visión amplia al ex presidente Vicente Fox, quien gobernó México entre 2000 y 2006. 

Publicidad

Además de pertenecer al mismo partido, el ex diputado federal y Fernández de Cevallos estrecharon su amistad a través de Liliana León Maldonado, la entonces novia y hoy esposa del político desaparecido. 

Muñoz Serrano, originario de Tepatitlán, Jalisco, fue alcalde de Arandas en 1995, donde conoció a la familia de León, originaria de este municipio. Su relación fue primero con el padre de ella, quien en ese tiempo tuvo algunos cargos en el municipio, y luego con la familia a la que ingresaría Fernández de Cevallos. 

"Buen conversador, de buenos modales e inteligencia brillante, Diego Fernández siempre será asociado a la figura del mexicano hacendado, el hombre de poder; su pipa y una buena montura de caballo forman parte ya de su atuendo", dice por su parte otro panista cercano a él, que pidió no ser identificado. 

"Diego es un baluarte del PAN, no sólo por su carisma, también por su astucia y brújula política, en lo jurídico tiene lógica jurídica y tiene una salida, el siempre busca cuando todo mundo se ha rendido", acota Muñoz. 

"El Jefe y sus amigos

El mote de "Jefe" le viene de su liderazgo nato, de su voz clara y fuerte. Un liderazgo que ejerció cuando coordinó a la bancada panista en el Congreso de la Unión y luego en aquellos discursos memorables como candidato a la presidencia de México, reconoce Muñoz. 

Recuerda también que fue en la campaña presidencial de 1994, cuando Fernández de Cevallos acuñó el término del "viejerío" para referirse a las mujeres que le brindaron su apoyo en la contienda. 

"Dicho en la voz del 'Jefe', gustó mucho y las mujeres le aplaudieron, si lo hubiera dicho alguien sin el carisma de él, quizá el resultado hubiera sido otro", dice.

"Aunque desde el 2006, Fernández de Cevallos no ostenta cargos públicos, siempre se ha mantenido en contacto con el partido, es consultado por personajes como el secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y el dirigente nacional del albiazul, César Nava", asegura Muñoz. 

Agrega que Fernández de Cevallos conserva una buena amistad con la dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Beatriz Paredes, y con el ex Procurador General de la República, Antonio Lozano Gracia. 

La carretera del amor 

La vida sentimental de Diego Fernández de Cevallos cambió hace seis años cuando conoció a Liliana León Maldonado, quien había sido "Señorita Arandas" en 1992 y pertenecía a una de las familias de abolengo de la zona; es 37 años más joven que él. 

Al conocerla, dejó atrás una relación de más de 20 años con su hasta entonces esposa Claudia Gutiérrez Navarrete, con la que procreó tres hijos: Diego, David y Claudia. 

Fernández de Cevallos tenía que viajar desde el centro del país a Arandas para visitar a su hoy esposa. Fue así que junto con el gobierno del estado impulsó en 2005 la construcción del tramo carretero de 32 kilómetros que unió a los municipios de Tepatitlán y Arandas, en la zona alteña del estado. 

Si bien, el estado y los municipios aportaron los 334 millones de pesos que costó la obra, el "Jefe"prestó la maquinaria con la que se ahorrarían unos 32 millones de pesos, según información del gobierno de Jalisco. 

El entonces senador acudió a la inauguración de la obra donde declamó el siguiente verso: "Qué extraño que los amores imploren, yo del destino si estoy enfermo de amor, por las reinas y flores que adornan este camino", relataron las crónicas periodísticas de ese entonces. 

Los pobladores de la zona no tardaron en bautizar a este tramo como la "carretera del amor", mote con el que todavía se le conoce. 

Fernández de Cevallos y Liliana León contrajeron nupcias religiosas el año pasado. 

La trayectoria del "Jefe"

Diego Fernández de Cevallos nació hace 69 años en la Ciudad de México. 

Abogado de profesión, se incorporó  al PAN en 1959, compartiendo la lucha partidista con personajes como Manuel Clouthier y Luis H. Álvarez, dos de las figuras emblemáticas de ese partido y, junto con Fernández de Cevallos, todos ex candidatos presidenciales.  

Los primeros años de estudios los realizó en Querétaro y luego se trasladó a Jalisco, donde cursó la secundaria y el bachillerato en el Instituto de Ciencias, dirigido por jesuítas. Obtuvo la licenciatura en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). 

Fernández de Cevallos fue candidato de su partido a la presidencia de la República en 1994. Participó en el primer debate de candidatos rumbo a la presidencia y, según las crónicas de la época, superó a sus oponentes: Ernesto Zedillo y Cuauhtémoc Cárdenas.

Sin embargo, de manera inexplicable para los analistas políticos de 1994, Fernández de Cevallos bajó la intensidad de su campaña y terminó perdiendo la contienda frente al candidato del PRI, Ernesto Zedillo. Tiempo después, versiones sin confirmar por el panista, aseguraron que había recibido amenazas.

También ha sido consejero del PAN, diputado federal y senador en dos ocasiones. 

Es considerado en el ámbito jurídico como uno de los mejores abogados de este país. Uno de los casos más sonados que protagonizó fue la devolución de 1,800 millones de pesos que consiguió su despacho en el 2000, por concepto de dos impuestos a la empresa mexicana Jugos del Valle.

Pero su doble actividad -político y litigante- le ha acarreado un sinfín de críticas y acusaciones de tráfico de influencias y enriquecimiento inexplicable.

Andrés Manuel López Obrador, ex candidato presidencial de la izquierda mexicana y autodenominado "presidente legítimo", es uno de sus principales críticos.

En 2009, López Obrador acusó judicialmente un grupo de políticos y empresarios, entre los que se encontraban a Fernández de Cevallos y los ex presidentes Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y al actual mandatario Felipe Calderón.

"El grupo de delincuentes que denunciamos ha venido llevando a cabo, de manera impune, actos que violan la Constitución y las leyes de la República”, afirmó entonces López Obrador en el contenido de la acusación interpuesta ante la PGR por su representante legal, Agustín Ortiz Pinchetti. 

Newsletter

Únete a nuestra comunidad. Te mandaremos una selección de nuestras historias.

Publicidad

Publicidad