La SCJN rechaza otra controversia por la extinción de Luz y Fuerza
La controversia constitucional en contra del decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro (LyFC) presentada por diputados federales fue desechada de manera definitiva por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, informó la secretaría del Trabajo.
El pasado 11 de mayo, diputados el PRD y PT impugnaron ante la SCJN la acción del gobierno federal, aunque no lograron obtener las firmas necesarias para llevar a cabo el procedimiento de la controversia.
La dependencia recordó que la Corte ya había desechado dos controversias constitucionales por el mismo acto, presentadas por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal y el municipio de Tetepango, Hidalgo, los días 10 y 20 de noviembre de 2009, en ese orden.
El ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea promovió un acuerdo para desechar el procedimiento por notoriamente improcedente, puesto que los diputados carecen de legitimación para promoverla, informó la secretaría.
Ante la decisión de la Corte, los legisladores presentaron un recurso de reclamación, del cual tuvieron conocimiento los ministros de la Primera Sala de la SCJN. Sin embargo, los ministros resolvieron por unanimidad declarar infundado el recurso de reclamación interpuesto.
La secretaría del Trabajo dejó claro que con lo anterior, no existen más controversias constitucionales pendientes de resolverse en contra del decreto del 10 de octubre de 2009 que extinguió a la compañía de luz.
El presidente Felipe Calderón justificó la extinción de la compañía Luz y Fuerza del Centro argumentando que la compañía representaba un "gasto excesivo".
Alrededor de 43,000 trabajadores se quedaron sin empleo. Desde entonces, los electricistas han realizado protestas contra el gobierno federal sin que hasta el momento hayan logrado echar atrás el decreto.
El gobierno ofreció indemnizar a los electricistas y recontratar en la Comisión Federal de Electricidad a quien se capacitara. La Secretaría de Gobernación y el SME entraron en conversaciones desde el año pasado para resolver el conflicto, sin resultados.
