La UNAM descarta impacto negativo en la adopción gay
Varios estudios publicados por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) descartan el impacto negativo en el desarrollo de los niños adoptados por parejas homosexuales, además de que aseguran que no se violan los derechos de los menores y garantizan la igualdad de acceso a las familias homoparentales.
Otros informes elaborados por instituciones como el Centro de Estudios de adopción y el Instituto Mexicano de Orientación Sexual advierten de los problemas generados en los menores por crecer en un entorno familiar distinto al formado por madre y padre, por lo que sugieren a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que este jueves continúan con el debate en sesión pública , que no apruebe la adopción por parte de parejas del mismo sexo.
El ministro Sergio Valls, encargado de elaborar el proyecto de dictamen, solicitó a la UNAM la realización de estudios para determinar la factibilidad de los matrimonios entre parejas del mismo sexo y adopción.
La petición la realizó luego de que el procurador general de la República, Arturo Chávez y Chávez, interpusiera en enero pasado una acción de inconstitucionalidad en contra de las reformas al Código Civil del DF aprobadas por la Asamblea Legislativa con el argumento de que los matrimonios gay y la adopción por parte de estas parejas contravienen la Constitución, en lo que se refiere al concepto de familia y viola los derechos de los menores, aunado al riesgo que implica para el desarrollo de los niños que crecen con parejas homosexuales.
Motivos sin fundamento
El ministro Valls llegó a la conclusión, con base en los estudios que solicitó a la UNAM, de que la adopción por parte de parejas del mismo sexo no violan la Constitución, al contrario, señala que este grupo debe tener garantizado el derecho al igual que todo tipo de familia.
En cuatro de los cinco estudios solicitados por Valls –el quinto se refiere exclusivamente a la legalidad de los matrimonios gay- las conclusiones son en el sentido de que las reformas locales son constitucionales en torno a la adopción.
"No existen razones objetivas, ni científicamente fundadas, para conjeturar riesgos para los menores criados y/o adoptados por parejas homosexuales.
"En comparación general con las parejas heterosexuales, no hay diferencias significativas en los efectos psico-sociales para los niños (as)", señala el estudio elaborado por los doctores Juliana González y Jorge Enrique Linares, del Seminario de Ética y Bioética de la Facultad de Filosofía y Letras.
Agrega que "el interés superior de los menores consiste en su bienestar físico-mental, así como en el derecho a tener una familia o ser reintegrados en una familia cuando carecen de ella. Tanto las familias heteroparentales como las homoparentales pueden ofrecer las condiciones adecuadas para criar, cuidar y educar a niños (as) huérfanos o abandonados".
La postura en contra
En contraste, otros estudios, que no fueron solicitados por Valls, también de la UNAM, así como del Centro de Estudios de Adopción A.C. (CDEA) y delInstituto Mexicano de Orientación Sexual (IMOS), éste último a petición del ministro Sergio Aguirre Anguiano para fundamentar su voto en contra, subrayan los impactos negativos en el desarrollo de los menores.
Según el IMOS, el 90% de los niños criados por parejas del mismo sexo presentan problemas como estrés, rebeldía, pena, ansiedad y miedo. El organismo tomó como base ocho estudios de Estados Unidos y Gran Bretaña, que incluyen 251 entrevistas y testimonios de hijos con padres homosexuales.
A su vez, el CDEA entregó en la Corte un documento que afirma que "no existe el derecho de ejercer la paternidad por la vía biológica o adoptiva, más sin embargo, sí existe el derecho del niño a vivir y crecer en una familia. La figura paterna y materna son fundamentales en la crianza".
Mientras que el estudio Adopción: Deseo y Crianza, realizado por psicólogos de la UNAM, la Universidad Iberoamericana y la Asociación Mexicana de Psicoanálisis, destaca que la comunidad homosexual ve la adopción como derecho lo que "significa convertir al menor en una bandera política y no en cumplir el deseo de tener a un hijo", concluye entre otros.
El texto elaborado por Brenda García Hernández y Santiago José Ortega Serrano pretendía evidenciar las diferentes motivaciones y vínculos que se desarrollan a partir de la condición de adopción entre las familias heterosexuales y las homosexuales, pero también incluyó a personas solteras adoptivas.
Hogares monoparentales
Mientras, el documento realizado por Teresa Zamora Díaz de León y Carolina Grajales Valdespino, de la Escuela Nacional de Trabajo Social de la UNAM, concluye que no hay un tipo ideal de familia, debido a la cantidad de divorcios y hogares monoparentales, entre otros.
En México, de acuerdo con el Consejo Nacional de Población (Conapo), viven 23 millones de familias, según el informe. De éstas, el 33% son de conformación amplia, el 20% encabezadas por mujeres y el 10% están integradas por amigos que viven juntos, ancianos solidarios o parejas gay.