Los periodistas denuncian que el plan para protegerlos excluye al gremio
Organizaciones de la sociedad civil y periodistas denunciaron este jueves que el protocolo de seguridad para el gremio, presentado el miércoles por la Secretaría de Gobernación (Segob), deja fuera a los propios periodistas y a los defensores de derechos humanos.
Además, no cumple con "los requerimientos mínimos de un acuerdo que garantice que ni un periodista más sea atacado por el ejercicio de su profesión", dijeron los convocados, después de que la Segob anunciara ayer el convenio .
En conferencia de prensa, Brisa Solís, del Centro Nacional de Comunicación Social (Cencos) advirtió de que todos los crímenes contra periodistas han tenido como antecedente amenazas que no fueron atendidas por las autoridades, y este programa gubernamental no contempla ninguna medida de emergencia para estos casos.
La representante de la organización Periodistas de a Pie, Elia Baltazar, enfatizó que durante dos años las organizaciones habían empezado a trabajar en un mecanismo de defensa que no fue siquiera considerado en este protocolo.
"El no considerar la experiencia previa, que no se tomen en cuenta nuestras propias propuestas, es la señal de que este programa no puede llegar a buen puerto", aseguró Baltazar.
Otro punto criticado por los activistas fue el hecho de que se presentó un programa de trabajo que no tiene recursos asignados y toda la responsabilidad de la protección quedará en manos de los gobiernos estatales y su voluntad política para firmar el acuerdo.
"¿Lo peor es que sólo considera ataques desde el crimen organizado y el acoso desde el poder?", se pregunta Darío Ramírez, de la organización Artículo 19. En entrevista explicó que, si un presidente municipal ordenara el secuestro de un periodista "incómodo", éste estaría en completo estado de vulnerabilidad.
"Sabemos cómo son nuestros gobiernos, no podemos dejarles esta responsabilidad sin que haya un órgano vigilante del que tienen que formar parte los propios periodistas".
Finalmente, Ramírez expresó su respaldo a este primer paso "porque siempre es peor nada, pero aún falta mucho por hacer para garantizar la libertad de expresión en México".
Durante los últimos 10 años, 65 periodistas han sido asesinados en México, mientras que en los últimos cinco se han registrado 12 desapariciones y 17 atentados contra medios de comunicación, según datos de la Comisión Nacional de Derechos Humanos.
