El reto del PAN: ser una opción en las elecciones del 2012
Gustavo Enrique Madero Muñoz se convirtió en el nuevo dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), quien tendrá como principal reto llevar a su partido nuevamente al triunfo de las elecciones presidenciales en México en 2012.
El sobrino nieto del ex presidente de México, Francisco I. Madero , es senador del PAN y es reconocido por pertenecer a un grupo de panistas catalogados como Los bárbaros del Norte, quienes simpatizan con la corriente ideológica de Manuel Maquío Clouthier, quien encabezó un grupo de empresarios del norte del país que incursionaron en la política.
En su primer discurso como jefe político de su partido, Gustavo Madero dijo que "los principios, propuestas, ética y doctrina de Acción Nacional no los tiene ningún otro partido y ahí está la clave porque los mexicanos darán su apoyo al PAN".
De acuerdo con politólogos, la llegada de Madero significa un triunfo para el PAN, pues su elección interna fue "impecable" y para el presidente Felipe Calderón, quien demostró que no había "dados cargados" hacia ningún aspirante.
Sin embargo, coincidieron en que el reto mayor vendrá después, para demostrar si el PAN puede ser opción para los mexicanos en el 2012, pues durante una década de gobiernos emanados de este partido político, los problemas como la inseguridad y la crisis económica han hecho mella en su proyecto como gobierno.
Macario Schettino, analista político y profesor investigador del Tecnológico de Monterrey, aseguró que con su elección interna, el PAN mostró que hay tres grupos en el interior de este partido, dos de ellos cercanos al presidente Felipe Calderón y uno que no lo es.
Este tercer grupo fue el que llevó al triunfo a Gustavo Madero, pues era el integrado por Cecilia Romero y Judith Díaz, ambas candidatas a la dirigencia panista.
"Esto es importante para entender la dinámica interna del PAN. Esta elección fortalece a Calderón porque, a diferencia de los anteriores, que fueron impulsados directamente por el presidente, en esta ocasión el ganador fue determinado fundamentalmente por este tercer grupo entre las dos opciones", explicó quién ha sido también director de Investigación y Programas Doctorales del Tecnológico de Monterrey, campus Ciudad de México.
Schettino consideró que Gustavo Madero ha sido proclive a las alianzas electorales y por ello se espera que en el 2011 se concrete una alianza con el Partido de la Revolución Democrática (PRD) en las próximas elecciones del Estado de México. En el caso de las elecciones del 2012, lo ve difícil.
Para el especialista en temas económicos y políticos, el reto de Gustavo Madero será convencer al electorado de que el PAN puede ser una opción viable para el 2012.
"El proceso de elección fortalece esta capacidad del PAN de mantenerse unido y de procesar el resultado de 2012. Pero la realidad es que tendrán que ver qué tanta capacidad tienen para salir igual en su proceso de elección rumbo al 2012".
Definió a Madero como una persona de mucha habilidad para la relación personal "tiene una visión optimista sobre la política. Es un buen negociador, pero no le haría nada mal que tuviera a alguien que pudiera negociar y le haría falta tener a alguien más duro. El secretario debiera ser alguien más duro que lo que es Gustavo Madero".
El reto: convencer que el PAN es una buena elección
Para Lorenzo Meyer, historiador y académico del Colegio de México, el PAN logró lo que no han hecho otros partidos políticos como el PRD o el mismo PRI: lograr unidad en su proceso interno para elegir a su dirigente nacional.
"Lo que se consiguió en primer lugar es que no siguiera la división, que no se ahondaran las fracturas. Por el momento, consiguió detener un proceso que se dio con la expulsión de Manuel Espino (ex dirigente nacional del PAN, que ahora ha dicho que se arrepiente de haber promovido la candidatura del presidente Felipe Calderón) y con las acusaciones internas de que Felipe Calderón tenía un candidato y que eso iba a dividir al partido. Eso no pasó", explicó el analista político.
Meyer también reconoció que el PAN supo llevar su elección interna a diferencia del PRD, pues "cada vez que este partido tiene elecciones internas, es una desgracia el resultado".
"Aquí el PAN sabe manejar muy bien el proceso porque son unos cuantos los que participan en la elección. No es la militancia del partido y mucho menos se abre a la sociedad, es elitista el proceso y eso ayuda a que esté todo bajo control".
El problema fundamental del PAN no es quién sea su líder. El problema fundamental, dice Meyer, es que el PAN ha fallado en poner en práctica el proyecto que fue diseñando y que fue su bandera política desde su creación en 1939.
"Si lo que quieren es refrendar el poder en 2012, los retos que tienen enfrente son enormes y esto de la elección interna del partido es algo minúsculo comparado con el reto principal que es convencer a la sociedad mexicana de que no han fracasado en su proyecto".
Entre los ejemplos a vencer en cuanto a imagen, según Lorenzo Meyer, está convencer a los mexicanos de que la lucha contra el crimen organizado no ha sido en vano, que la economía mejorará y que habrá un proyecto de nación mejor al que se está presentando actualmente.
Otro gran reto por enfrentar por parte de Gustavo Madero serán las elecciones en el Estado de México, pues a pesar de que pueden aliarse con el PRD "oficial", el grupo del ex candidato a la presidencia Andrés Manuel López Obrador, quien todavía tiene amplia simpatía en el electorado, podría provocar que esa alianza entre el PAN y el PRD fracase.
Lo que ambos analistas políticos prevén es que una alianza entre PRD y PAN en el 2012 para elegir a un candidato único en las elecciones presidenciales es prácticamente imposible.
"Difícil que en 2012 se alíen. El presidente Felipe Calderón sacó la idea de un candidato ciudadano, que puede ser interpretado que en las filas del PAN. Pero no hay figuras adecuadas para hacer esa posible unión entre izquierda y derecha para enfrentar al PRI. Hacer pensar que lo que sucedió en Oaxaca es el principio de algo que puede suceder a nivel nacional, creo que sería simplificar mucho. No veo viable esa unión de agua y aceite. En realidad se parecen más el PRI y el PAN que el PAN y el PRD", concluyó Meyer.