, presunto agresor del futbolista Salvador Cabañas, fue detenido por la Policía Federal en la Ciudad de México, confirmó a CNNMéxico la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP).
La dependencia presentó la tarde de este martes en el Centro de Mando de Iztapalapa al JJ, quien negó ser quien disparó contra el futbolista, .
La detención se produce casi un año después de que Balderas Garza disparó a Cabañas, mientras se encontraban en el bar Bar, en el sur de la capital mexicana.
El incidente contra el futbolista paraguayo ocurrió la madrugada del lunes 25 de enero de 2010.
De acuerdo con las autoridades, Balderas Garza es amigo del narcotraficante , detenido en agosto del año pasado.
En sus , Valdez Villarreal aseguró que regañó a Balderas Garza por haber disparado contra Cabañas.
“Él (El JJ) vivía allá en Laredo (Texas), y cuando me vine, él también se vino conmigo; como sabían que era mi amigo, pues también lo querían matar. Aquí en México andaba conmigo, pero pues cada quien por su lado, pero le dije que si se le ofrecía algo pues podía echarle la mano”, dijo La Barbie, quien lideraba el cártel del Pacífico Sur.
“Eran amigos los dos (Cabañas y Balderas Garza)... ese día andaba de malas Cabañas, estaban alegando”, señaló La Barbie, y afirmó que El JJ le habló después del incidente. “Lo regañé, pero ya lo había hecho”.
Las declaraciones de La Barbie coinciden con las de Francisco Barreto García, El Contador, quien se encontraba con El JJ el día del atentado contra el ex futbolista del equipo América.
El Contador sostiene que la relación entre El JJ y La Barbie comenzó en 2007, cuando éste lo reclutó para trabajar en el cártel del narcotráfico de .
Según El Contador, La Barbie y El JJ se conocieron cuando trabajaban como traficantes de marihuana entre Estados Unidos y México.
Dependencias de seguridad en la Ciudad de México señalaron a Balderas Garza como distribuidor de drogas en diversos bares de la capital.
Tras el ataque a Cabañas, La Barbie aseguró haber escondido a Balderas Garza en uno de los edificios bajo su control en Atizapán, en el central Estado de México, durante tres meses.