El Ejército está mejor equipado para enfrentar al crimen, afirma Calderón
El presidente de México, Felipe Calderón, envió un mensaje de apoyo a las Fuerzas Armadas y dijo que las está equipando para que los militares puedan enfrentar con éxito a la delincuencia organizada.
Calderón explicó que su gobierno ha destinado recursos a la compra de aviones, helicópteros, vehículos, equipos de comunicación, radares y armamento.
"Estamos contribuyendo al fortalecimiento de la institución a través de una importante inversión en equipamiento para que puedan seguir trabajando con ímpetu por el bien del país", dijo este jueves en Chihuahua, en el norte del país, durante un acto con motivo del Día de la Fuerza Aérea Mexicana.
"El presupuesto para inversión en equipamiento de las Fuerzas Armadas se ha más que triplicado respecto del mismo periodo del sexenio anterior", agregó el mandatario, aunque no detalló la cifra.
El presidente afirmó que, para ayudar a los militares, su gobierno ha ordenado aumentos salariales anuales, compensaciones y programas de apoyos para sus familias.
Desde el inicio de su mandato, en diciembre de 2006, Calderón ha lanzado una serie de operativos contra la delincuencia —en particular contra los cárteles del narcotráfico— en varios estados de México, apoyados en el Ejército y la Marina.
Algunos organismos de derechos humanos sostienen que los militares no tienen la preparación para realizar labores de seguridad pública e incurren en abusos contra civiles , aunque el gobierno de México defiende el uso de las Fuerzas Armadas en tareas anticrimen bajo el argumento de que son necesarias para enfrentar a las organizaciones delictivas.
"El Estado mexicano tiene que tiene que hacer un esfuerzo enorme para poder modernizar la flota de la Fuerza Aérea (…) y que tenemos que hacer en poco tiempo un esfuerzo de modernización que no se hizo durante muchos años o, quizá, décadas", lamentó Calderón.
Durante el gobierno de Calderón, más de 34,000 personas han muerto en acciones relacionadas con la delincuencia. De ese total, las autoridades afirman que 90% corresponde a personas vinculadas con grupos delictivos, 5% a policías, soldados o marinos, y el 5% restante a civiles.