Jaime Zapata, el segundo agente asesinado en la historia del ICE
El asesinato del agente especial Jaime J. Zapata , en San Luis Potosí, es apenas la segunda baja por ataque por arma de fuego que registra el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), desde su creación en 2003.
De acuerdo a los registros de The Officer Down Memorial Page , una organización sin fines de lucro, solamente el agente David Gray Wilhelm, de la oficina del ICE en Atlanta, Georgia, había sido asesinado por disparo de arma de fuego, el 22 de marzo de 2005.
El agente estaba en su domicilio cuando fue atacado por Brian Gene Nichols, un delincuente que buscaba esconderse tras escapar horas antes de la Corte del Condado de Fulton, donde había asesinado al juez que lo procesaba, a un oficial, y una asistente.
Zapata murió el martes a consecuencia de impactos que recibió cuando viajaba en una camioneta con otro agente de ICE, ambos comisionados a la oficina del ICE en la Embajada de Estados Unidos en México , por la carretera San Luis- Querétaro.
The Officer Down Memorial Page registra puntualmente los decesos de policías de todas las corporaciones de Estados Unidos, a manera de homenaje.
En su sitio de internet da cuenta de los más de 20,000 agentes estadounidenses en servicio que han muerto desde 1791.
En sus registros se encuentra Enrique Salazar Camarena , de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), quien hasta ahora era el único agente federal estadounidense asesinado en México, en 1985, por el extinto cártel de Guadalajara.
Sin embargo, de acuerdo con analistas, ambos crímenes tienen características diferentes , ya que Camarena eraun objetivo de los criminales, mientras que no hay indicios para afirmar que la agresión a Zapata y su compañero haya sido premeditada.
ICE es una de las siete agencias dependientes del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos, despacho creado por el Gobierno federal en 2002 como respuesta a los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York.
Para el establecimiento en 2003 del ICE, el principal brazo del Departamento de Seguridad Interna, fueron fusionadas las agencias del Servicio de Aduanas y del Servicio de Inmigración y Naturalización existentes.
Con la finalidad de identificar y perseguir actividades criminales que amenacen las fronteras, economía, transporte e infraestructura de territorio estadounidense, el ICE cuenta, según su portal, con 20 mil empleados y representaciones en 47 países, entre ellos México.
Después del Buró Federal de Investigación, (FBI, por sus siglas en inglés), es la segunda agencia federal más importante de Estados Unidos.
En mayo de 2010, ICE daba cuenta de 48 agentes y oficiales pertenecientes a sus filas y a las de las agencias que la precedieron muertos en la línea del deber desde 1915, por ataques o accidentes.
Zapata, de 32 años de edad y nativo de Brownsville, Texas, pertenecía a la agencia desde 2006, según informó el ICE.
La investigación del ataque, en el cual el segundo agente resultó lesionado en una pierna, fue abierta directamente por la Procuraduría General de la República (PGR) y en las pesquisas está colaborando el Gobierno estadounidense.
Según un funcionario de la PGR, los agentes viajaban en una Suburban, con placas diplomáticas, de la capital del estado induatrial de Nuevo León, Monterrey, a la Ciudad de México , cuando sufrieron la agresión, y no al revés, como indicaron los primeros reportes.
Indicó que en la averiguación previa todavía no consta cuáles eran sus actividades ni se conocían los motivos por los que viajaban por carretera.
Aunque el gobernador de San Luis Potosí, Fernando Toranzo, refirió que el ataque fue perpetrado por el crimen organizado, el funcionario de la PGR enfatizó que por el momento aún no existe una línea de investigación firme.
San Luis Potosí es un estado que, según reportes de autoridades federales, tiene una importante presencia de la organización criminal de Los Zetas desde 2008.
Desde la noche del martes, personal de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) se trasladó de la Ciudad de México al estado para indagar el caso.