'El Piolín', un presunto asesino que pisó la cárcel y lo dejaron ir
Julián Zapata Espinoza, El Piolín, dirigía una célula de Los Zetas en San Luis Potosí al tiempo que enfrentaba en libertad un juicio por tres delitos federales.
El presunto criminal fue detenido este miércoles por militares, acusado de atacar el 15 de febrero a dos agentes especiales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés).
En el percance, el agente Jaime Zapata murió al recibir cinco disparos mientras que su compañero Víctor Ávila quedó lesionado en la pierna derecha. Ambos estaban adscritos a la oficina del ICE en la Embajada de Estados Unidos en México.
El gobierno de Barack Obama celebró la captura del presunto asesino del agente Zapata, y la presidencia de México se comprometió a resolver el caso. Sin embargo, las autoridades mexicanas ya habían detenido a El Piolín en el pasado, aunque lo dejaron en libertad por falta de pruebas.
Los antecedentes penales muestran que El Piolín llevaba poco más de un año de estar bajo proceso penal ante el juez cuarto de distrito en San Luis Potosí, después de ser detenido en diciembre de 2009 en el municipio de Rioverde.
En ese momento, militares sorprendieron a Zapata Espinoza y a otras seis personas en el Fraccionamiento Los Sabinos en San Luis Potosí, después que una denuncia ciudadana alertó de la presencia de un grupo armado.
Los efectivos de la Doceava Zona Militar aseguraron a los presuntos zetas siete armas de fuego, 692 balas, seis vehículos y tres gorras con siglas de la Policía Federal y la Agencia Federal de Investigación (AFI).
Junto a sus cómplices, El Piolín fue consignado por la Procuraduría General de la República (PGR) por los delitos de portación de arma de fuego, posesión de cartuchos, posesión de divisas falsas de la Policía Federal y la AFI, delincuencia organizada y contrabando.
Casi tres meses después de ser encarcelado, el 9 de marzo de 2010 Zapata Espinoza obtuvo libertad bajo fianza porque los delitos de los que se le acusaba no eran graves.
Al considerar que no existían pruebas suficientes, un juez abandonó la acusación de la PGR contra El Piolín por los delitos de delincuencia organizada y contrabando.
Pese a quedar en libertad, El Piolín debía presentarse en el juzgado a firmar el libro de control de procesados; pero incumplió esa obligación y el 18 de enero de este año se le revocó la libertad provisional que había ganado casi un año atrás, y comenzó a ser buscado.
El proceso penal no impidió que El Piolín se encargara de un grupo de sicarios para la operación de tráfico de drogas y secuestros de Los Zetas en la ciudad de San Luis Potosí, capital del estado.
Tras su captura este miércoles, El Piolín admitió ser jefe de un grupo de pistoleros, y atribuyó a una "confusión" el ataque contra los dos agentes estadounidenses en San Luis Potosí, de acuerdo con la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
Según la versión de la Sedena, la célula de sicarios liderados por El Piolín disparó contra el vehículo donde viajaban los agentes , porque los confundieron con unos rivales que circulaban en una camioneta similar a la Suburban tripulada por los agentes Zapata y Ávila, quienes regresaban a la Ciudad de México tras una reunión en la capital potosina.
Junto con El Piolín, las autoridades detuvieron a sus presuntos cómplices Jesús Iván Quezada Peña, El Loco, Rubén Darío Venegas, El Catracho, quienes también habrían participado en el ataque. Tres mujeres, incluida la esposa de Zapata Espinoza, también fueron arrestadas.
La Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) solicitó a un juez el arraigo en contra El Piolín por el asesinato del agente del ICE Jaime Zapata.