Una de las armas usadas contra el agente Zapata provenía de Texas
Autoridades de Estados Unidos detectaron que una de las armas utilizadas en el ataque en México contra dos agentes estadounidenses provenía de la ciudad de Dallas, en el estado de Texas, reportó la agencia Notimex.
El arma pertenecía a un residente de Dallas, que fue arrestado este lunes junto con otros dos sospechosos de haber traficado más armamento a territorio mexicano, indicó la agencia gubernamental mexicana citando a la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF, por sus siglas en inglés).
La agresión contra dos agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas estadounidenses (ICE, por sus siglas en inglés) ocurrió el 15 de febrero pasado . A raíz del ataque murió el agente Jaime Zapata mientras que Víctor Ávila, su compañero, resultó herido.
Ambos fueron atacados por una célula del grupo delictivo de Los Zetas en el estado de San Luis Potosí, en el norte mexicano, cuando se dirigían por carretera de la Ciudad de México a Nuevo León.
El incidente fue condenado por ambos gobiernos, que prometieron trabajar juntos para encontrar a los responsables. Hasta ahora, las autoridades mexicanas han detenido a los dos presuntos líderes de la célula de Los Zetas que cometió el crimen: Julián Zapata Espinosa, El Piolín , y Sergio Mora Cortés, El Toto .
Tras el ataque, funcionarios mexicanos señalaron que, si bien México debía trabajar para dar con los agresores, Estados Unidos debía hacer más para detener el tráfico de armas que llegan a los delincuentes mexicanos.
Uno de los funcionarios que apuntaron a la posibilidad de que las armas usadas en la agresión provinieran de Estados Unidos fue el gobernador de Chihuahua, César Duarte, en entrevista con CNN.
Anteriormente, el gobierno federal ha llamado a sus pares en Washington a tomar las medidas necesarias para detener el flujo de armamento y dinero en efectivo de Estados Unidos a México.
El propio presidente Felipe Calderón hizo ese exhorto durante un discurso ante el Congreso estadounidense, el año pasado .
Estados Unidos afirma esforzarse para poner fin al tráfico ilegal de armas desde su territorio, pero reconoce que tiene trabajo pendiente. Ambos países comparten más de 3,000 kilómetros de frontera.