Pascual prioriza la relación bilateral México-EU sobre la agenda interna

El embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, aseguró que los sentimientos personales sobre su próxima salida del país son secundarios, respecto de la relación entre los dos países, informó Notimex.
México y Estados Unidos “tienen, quieren y van a seguir poniendo sus intereses nacionales por encima de las agendas que tenemos en los dos países; ahí es donde nos debemos enfocar”, aclaró.
Durante una conferencia de prensa en la sede de la embajada de Estados Unidos en México, donde acompañó al secretario del Interior de su país, Ken Salazar, el diplomático enfatizó que “los sentimientos no tienen que ver con las relaciones entre los dos países”.
“En este tema debemos enfocarnos en los intereses nacionales”, aseguró al responder la pregunta de: “¿con qué sentimientos deja México?”, después de la polémica surgida en torno a su persona.
Pascual expuso, según Notimex, que lo importante es la relación bilateral y, en ella, el impulso a los intereses nacionales de cada una de ambas naciones. “Eso es lo crítico para servir a los intereses de los ciudadanos de los dos países”, indicó.
Notimex agregó que, sin ahondar más en su experiencia personal, el embajador se limitó a asegurar que “cuando eventualmente me vaya, me voy reconociendo que los dos países tienen, quieren y van a seguir poniendo sus intereses nacionales encima de la agenda interna”.
El embajador presentó el pasado 19 de marzo su renuncia al presidente Barack Obama, quien la aceptó según un comunicado de la secretaria de Estado, Hillary Clinton, donde expresaban su “gran pesar” por la dimisión.
Antes de la deserción del diplomático, el presidente de México, Felipe Calderón, admitió haber perdido confianza en el embajador Pascual a raíz de las críticas que, según filtraciones de WikiLeaks , el diplomático hizo de la lucha mexicana contra el narcotráfico.
En diciembre pasado, WikiLeaks divulgó un cable de la Embajada estadounidense en México, supuestamente redactado por Pascual, en el que el diplomático criticaba al Ejército mexicano por ser "lento" y tener "aversión al riesgo ". Pascual, en cambio, aplaudía la cooperación de la Marina con las autoridades estadounidenses.