El gobierno de Oaxaca acepta investigar desaparición de guerrilleros
Las desapariciones de dos integrantes del Ejército Popular Revolucionario (EPR), Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez desde el 27 de mayo de 2007 continúan sin ser aclaradas. Sin embargo, los familiares han visto un asomo de voluntad política tras una recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos al gobierno de Oaxaca.
El gobernador emergido de una alianza entre los partidos Acción Nacional y de la Revolución Democrática, después de 81 años de gobiernos priistas, Gabino Cué Monteagudo, aceptó a principios de abril la recomendación de la CNDH en el sentido de investigar la desaparición de Reyes Amaya y Cruz Sánchez.
Nadin Reyes Maldonado, hija de uno de los desaparecidos, espera que la aceptación de la recomendación de la CNDH por parte del gobierno estatal “no sea meramente coyuntural y que se quede solamente en discurso, sino que realmente se investigue”.
La falta de acción también involucra a la Procuraduría General de la República (PGR), asegura Nadin, quien ha hecho del esclarecimiento de la desaparición de su padre su motivo de vivir .
“Sigue la misma negativa (de la PGR) para investigar los casos. Vemos que no hay muestra de voluntad para que los familiares conozcamos los supuestos avances de las investigaciones”, dijo a CNNMéxico.
La hija del integrante del EPR se graduó de la Escuela Normal en 2007, y en lugar de comenzar a ejercer su profesión, se dio a la tarea de buscarlo. Fundó la organización Hasta Encontrarlos a la que se unieron familiares de Gabriel Cruz Sánchez, también desaparecido. Desde entonces, encabezan un movimiento activista para exigir la aparición con vida de estos dos hombres que el EPR ha reclamado como parte de sus filas.
Al movimiento se han unido personas de otros estados de la República Mexicana que pasan por una situación similar, “aunque también se solidarizan con nosotros personas que no tienen nada que ver, porque quieren evitar lo que hemos pasado nosotros”.
Reyes Maldonado asegura que en ningún momento fue avisada por alguna autoridad de que el gobierno de Oaxaca aceptaría la recomendación de la CNDH para buscar a su padre y Cruz Sánchez, “me enteré por la prensa, pero esperamos pronto entrar en contacto, porque estaremos atentas a que se cumpla lo que ha anunciado el gobernador”.
Otros casos de desapariciones
Juan Sosa Maldonado es parte del movimiento Hasta Encontrarlos. En 1998 fue detenido por 25 días y llevado a una cárcel de Salina Cruz, en la región del Istmo de Tehuantepec, acusado de pertenecer a las filas del EPR, pero salió libre en mayo de 2001 por faltas de pruebas.
A partir de ese momento, Sosa Maldonado empezó a abanderar causas por aquellas personas que han sido encarceladas injustificadamente. El día 25 parece tener una relación con la desaparición de personas vinculadas a la guerrilla.
El 25 de septiembre de 1996, el Ejército Mexicano y la Policía Estatal detuvieron a los integrantes del cabildo de San Agustín Loxicha, acusados de pertenecer al EPR. Cuando apareció el grupo guerrillero el 28 de agosto de 1996 en la Crucecita, Huatulco, uno de los guerrilleros muertos, era integrante del cabildo, de San Agustín Loxicha, poblado que se encuentra a unos 200 kilómetros al sur de la capital oaxaqueña.
El 25 de mayo de 2007 desaparecieron Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez, mientras que el 25 de noviembre del 2006 la Policía Federal desalojó del zócalo de la ciudad de Oaxaca a los integrantes de la Asamblea Popular de los Pueblos de Oaxaca (APPO), quienes por seis meses tuvieron bajo su control el centro de la ciudad.
Por esa razón, Sosa Maldonado y demás integrantes del movimiento Hasta Encontrarlos se manifiestan cada 25 de enero en el centro de la capital de Oaxaca con el objetivo de exigir la presentación con vida de los desaparecidos y la libertad de los llamados "presos políticos".
Edmundo Reyes Amaya y Gabriel Cruz Sánchez han sido reclamados por la dirigencia del EPR para que aparezcan vivos. Como acciones de presión, la milicia hizo estallar bombas en ductos de la paraestatal de Petróleos Mexicanos (PEMEX) en noviembre del 2008. La primera explosión se registró en Salamanca, Guanajuato, y hubo una posterior en Querétaro.
Cué Monteagudo se ha comprometido a buscar a estos dos hombres identificados con la guerrilla y para ello echará mano de la Fiscalía Especial para Atender los Delitos de Impacto y Trascendencia Social.