Encubrir el delito de un familiar o un amigo se podrá penalizar con cárcel

A partir de ahora, no denunciar a un familiar o un amigo que sea delincuente podría llevar a los ciudadanos a la cárcel.

Penas de seis meses a seis años de prisión y de 50 a 250 días de salario mínimo de multa podrán aplicarse a quienes encubran un delito cometido por algún familiar o amigo, de acuerdo con cambios aprobados por la Cámara de Diputados al Código Penal Federal y a la Ley Federal contra la Delincuencia Organizada.

Actualmente, el Código Federal de Procedimientos Penales exenta de declarar como testigos a personas ligadas con un criminal por parentesco, amistad o estimación; exime también de rendir declaración a profesionistas que, por su labor, no puedan dar a conocer el testimonio o la información de algún delito, como abogados, periodistas, médicos o ministros de culto.

Sin embargo, los legisladores consideraron que esto representa un obstáculo para las investigaciones, por lo que Óscar Arce Paniagua, diputado del gobernante Partido Acción Nacional, propuso en su iniciativa que cuando se trate de delitos relacionados con la delincuencia organizada, este privilegio quede eliminado en el caso de los familiares.

“Esto representa un entorpecimiento en la investigación y la persecución de los delitos que compete al Ministerio Público, pues la autoridad se debe allegar de todos los elementos necesarios para llegar a una verdad histórica de los hechos.

Los legisladores aprobaron que cuando una persona declare con falsedad, altere las pruebas o simule algún acto jurídico para obtener una sentencia favorable a sus intereses, deberá ser castigado con pena de prisión y multa económica.

Mario Di Costanzo, diputado por el Partido del Trabajo, señaló que este delito debería extenderse también a los funcionarios públicos que emiten declaraciones falsas cuando se encuentran bajo juramento de decir la verdad, como cuando comparecen ante el Congreso de la Unión.

“No puede ser que esta minuta reafirme que en este país hay ciudadanos de primera y ciudadanos corrientes y sobre todo el hecho de que esto no pueda ser aplicado a los funcionarios que nos vienen aquí a mentir cada rato al Congreso. Éstas también son falsedades de declaraciones”, afirmó Di Costanzo en tribuna.

Para que tengan efecto, estos cambios deben ser aprobados también por el Senado de la República.