Un juez de EU declara a Benjamín Arellano Félix detenido y sin fianza
Benjamín Arellano Félix , supuesto cabecilla del Cártel de Tijuana, se declaró este lunes no culpable de los cargos de tráfico de drogas y quedó detenido sin fianza por orden de un juez federal en California.
La audiencia ante el juez federal Larry Burns, en San Diego, estuvo rodeada de fuerte vigilancia policial, y a ella asistieron familiares de Arellano, que viajaron desde Mexicali, Baja California.
Arellano Félix, quien había sido detenido en México en 2002 y cuya extradición aprobada en 2007 se cumplió el viernes pasado , quedó detenido sin fianza por orden del magistrado.
La presentación y lectura de cargos estuvo rodeada de fuertes medidas de protección en el tribunal federal en el centro de San Diego, y se llevó a cabo en una sala más grande que la habitual para audiencias similares, para acomodar a los espectadores y periodistas.
Las medidas de vigilancia y el uso de detectores de metales demoraron la audiencia.
Los abogados que representan a Arellano dijeron a los periodistas que, a pesar de nueve años de confinamiento solitario en una cárcel de México, su cliente se encuentra bien mental y físicamente.
Benjamín Arellano Félix y sus hermanos, miembros del Cártel de Tijuana, controlaron desde 1986 hasta inicios de la década pasada el trasiego de cocaína, marihuana y otras sustancias controladas que entraban a Estados Unidos por las ciudades fronterizas de Tijuana y Mexicali.
El liderazgo del Cartel de Tijuana empezó a debilitarse en 2002 cuando en un tiroteo en Sinaloa murió Ramón Arellano Félix, quien se encargaba de mantener la disciplina interna de la organización y de los asesinatos de adversarios.
En 2006, el Servicio de Guardacostas de EU capturó en una embarcación pesquera frente a las costas mexicanas a Francisco Javier Arellano Félix, quien había asumido la conducción de la organización tras la muerte de Ramón y el arresto de Benjamín.
Eduardo Arellano Félix, el último de los hermanos todavía en libertad fue capturado en octubre de 2008 tras un tiroteo con la policía en Tijuana. Estados Unidos ha pedido su extradición.
Fernando Sánchez Arellano, sobrino de los hermanos Arellano Félix, encabeza su propia organización que se ha separado de la banda. Actualmente está prófugo.
El viernes pasado la Procuraduría General de la República (PGR, fiscalía mexicana) recordó que Arellano Félix, alias El Señor, controló el flujo de cocaína, marihuana y otras sustancias, que entraban a EU desde las franjas fronterizas de Tijuana y Mexicali durante los años de mayor auge del cartel tijuanense.
Benjamín Arellano "mantuvo alejados al resto de los carteles de la droga (del estado noroccidental) de Baja California hasta el 9 de marzo de 2002, cuando fue aprehendido en una casa en Puebla" para enfrentar diversos cargos, según la fiscalía.
El grupo criminal de los Arellano Félix "sistemáticamente sobornó a oficiales de procuración de justicia y militares corruptos, quienes usaban su puesto y a sus subordinados para brindar protección a los integrantes de alto rango de la organización, al igual que a los embarques de la droga", explicó la PGR.
La extradición de Benjamín Arellano Félix fue la 415 de la administración del presidente Felipe Calderón a Estados Unidos y la primera de alto nivel desde que tomó posesión la procuradora general de México, Marisela Morales el pasado 7 de abril.
Al menos 34,000 personas han muerto en México en crímenes relacionados con la delincuencia organizada, desde que el gobierno federal inició en 2006 su estrategia de combate frontal a la delincuencia organizada.