El presunto jefe de 'La Familia’ dice que su vida corría peligro
El presunto líder de La Familia Michoacana, José de Jesús Méndez Vargas, El Chango , dio detalles sobre la formación del grupo delictivo y acusó a Salvador Gómez Martínez, La Tuta, otro de los principales operadores del grupo delictivo, de “traidor”.
En un video difundido por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal, Méndez Vargas indicó que abandonó el estado de Michoacán debido a que temía que ex integrantes del grupo criminal atentaran contra su vida.
“No tenía que hacer nada en Michoacán, mi vida corría peligro”, dijo. Al ser cuestionado sobre quién o quiénes podrían matarlo respondió que La Tuta sería el principal responsable en caso de haber muerto.
El presunto líder de La Familia Michoacana detalló que fue con Nazario Moreno González, quien murió en diciembre de 2010 a manos de la Policía Federal, formar la organización criminal cuyo principal objetivo era la venta de drogas al menudeo, principalmente cocaína.
Indicó que se conocieron en las calles de un pueblo y que se conocían desde hace mucho tiempo.
“Platicamos, hicimos un acuerdo y ahí cada quien se agarró por su lado y ahí ya se empezaron las actividades, cada quien tenía que controlar sus áreas. Michoacán estaba dividido en dos partes, el lado de él y el lado mío”, explicó.
Méndez Vargas declaró que controlaba las localidades michoacanas de Buenavista, La Ruana, Peribán, Los Reyes, Cotija, Zamora, y que Moreno González, a las que las autoridades identificaron como El Chayo, manejaba Lázaro Cárdenas, Los Rosales, Uruapan, Morelia, Zitácuaro, Huetamo, entre otras.
Agregó, que él y Moreno González decidieron nombrar La Familia Michoacana por su pueblo y por su gente.
Al referirse al reclutamiento de colaboradores, Méndez Vargas manifestó que una de las reglas para poder ingresar al grupo era que no consumieran drogas y que tuvieran según él, “suficiente inteligencia”.
“A cada quien se le asignaba un área, muchachos que no usaran droga, que mirábamos que tenían un perfil de que fueran buenos con toda la extensión de la palabra y que hicieran las cosas bien, de que no anduvieran secuestrando y que llevaran un buen rumbo”, admitió.
Señaló que cuando algunos integrantes no se alineaban “se les jalaba las orejas”.
“Si no entendían (…) a mí nunca me pasó algo así de que no entendieran todo el tiempo, fue gente muy disciplinada", declaró.
Según El Chango, los colaboradores de Moreno González realizaban robos y se dedicaban al secuestro en los últimos tres años.
En relación a Los Caballeros Templarios, otro grupo criminal que opera en el estado de Michoacán, el presunto líder de La Familia consideró que no tienen futuro y que muy pronto el gobierno los va capturar.
En su declaración ante la SSP federal, El Chango dijo que La Familia Michoacana pronto se va “desbaratar” y concluyó: “camarón que se duerme se lo lleva la corriente”.
La detención de Jesús Méndez ocurre casi seis meses después de la muerte en un operativo federal de Nazario Moreno González, El Chayo, uno de los supuestos fundadores y principales líderes de de La Familia.
Jesús Méndez asumió el liderazgo de La Familia entre 2004 y 2005, tras la detención del líder Carlos Rosales Mendoza, según datos de la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).
La Familia Michoacana fue creada en la década de 1980 bajo la dirección de Rosales Mendoza y se dedicaba a la producción y distribución de marihuana. Cuando se hizo una organización independiente, formó alianzas con el grupo de Los Zetas, entonces bajo las órdenes del narcotraficante Osiel Cárdenas, quien dirigía el cártel del Golfo.
El gobierno federal había colocado retratos de Méndez y de otros miembros destacados de la organización en anuncios espectaculares en lugares visibles de Michoacán.