Las lluvias y los vientos del huracán Alex llegaron desde el Océano Atlántico para arrasar con parte de la infraestructura de tres estados del noreste del país en julio de 2010. Un año más tarde, la entidad más afectada, Nuevo León, calcula que tardará 20 años en pagar la deuda que adquirió para reconstruir buena parte de sus calles, carreteras y puentes.
El Gobierno de Nuevo León adquirió dos deudas con el Banco Nacional de Obras y Servicios Púbicos (Banobras), por 6,507 millones de pesos. La mayor parte de las obras de reconstrucción ya están terminadas y ahora el gobierno y la oposición debaten si el uso de los recursos ha sido el indicado y cómo pagarán la deuda, según datos proporcionados por el diputado local, Víctor Fuentes Solís, a la revista Obras .
Nuevo León aporta el 8% del Producto Interno Bruto (PIB) del país y tiene una fuerte economía local.
Acueductos, muros de contención, emisores de agua residuales, calles, puentes, viviendas y escuelas tuvieron que ser construidos o reconstruidos en Monterrey, la capital de Nuevo León, y en otros 48 municipios. Un total de 2,639 familias lo perdieron todo, según datos del gobierno estatal.
, pero también porque la Comisión Nacional del Agua decidió desfogar algunas presas del norte del país que estaban al tope. La medida desbordó el río Bravo, que marca la frontera con Estados Unidos.
El Gobierno de Tamaulipas que vivían en asentamientos irregulares al borde del río, mientras que otras 40,000 familias estuvieron incomunicadas durante días y los gobiernos de México y Estados Unidos cerraron temporalmente sus cruces internacionales en Nuevo Laredo, Tamaulipas y Laredo, Texas.
En Coahuila hubo problemas de comunicación, algunas carreteras fueron cerradas y varias comunidades quedaron incomunicadas por días.
La Secretaría de Gobernación .