La eliminación de perros callejeros en Sonora provoca polémica en México
Una antigua medida para reducir el número de perros callejeros en el municipio de San Luis Río Colorado, en el estado norteño de Sonora, cobró relevancia en las redes sociales la semana pasada.
Las autoridades ofrecen un descuento de 200 pesos (unos 17 dólares) en impuestos a los ciudadanos que entreguen un can al Centro de Control Animal.
El hashtag #NoalaMatanzadePerrosenSonora se mantuvo entre los trending topics de Twitter por varios días, mientras que en Facebook el grupo En contra de la matanza de perros por $200 en San Luis Río Colorado, Son. cuenta con casi 1,400 adeptos.
"Hace dos años inició una condonación (no entrega de dinero en efectivo) en adeudos de agua potable e impuesto Predial", explicó el alcalde Manuel Baldenebro Arredondo, en una carta enviada al gobernador de Sonora, Guillermo Padres Elías.
"(Era) una forma de que se entregaran las mascotas que no podían ser atendidas por sus dueños".
De acuerdo con datos del Censo de 2010, elaborado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, y de las autoridades municipales, en San Luis Río Colorado hay al menos un perro por cada 3 habitantes. Y en los últimos dos años, según los datos proporcionados por el gobierno local, los ciudadanos han reportado unos 2,100 ataques de perros.
Personal de Comunicación Social del municipio explicó a CNNMéxico que una vez que los animales llegan al Centro los esterilizan, bañan y vacunan; si nadie los reclama o adopta, en los siguientes 15 días son sacrificados mediante una inyección letal.
Pero ambientalistas dudan de que el proceso sea así. En entrevista con CNNMéxico, Antemio Maya, presidente de la Asociación Protección del Perro Callejero, asegura que es frecuente en los centros antirrábicos matar a los animales a las 72 horas de que llegan, si no son reclamados.
"En ningún antirrábico de México dejan bonito a un perro para su adopción, generalmente los tienen en mazmorras y son electrocutados, si bien les va. En muchos casos, los matan a golpes, ahogados o a machetazos", dice.
En los últimos dos años, 14,344 perros murieron sacrificados en el municipio sonorense; 929 fueron entregados por un ciudadano, y sólo 501 de ellos reclamaron la exención de impuestos.
