La defensa de los 'tuiteros' acusados de terrorismo promueve un amparo
La defensa de los dos usuarios de redes sociales acusados de terrorismo y sabotaje por el gobierno de Veracruz promovió un amparo federal contra la orden de formal prisión que les fue dictada el 31 de agosto pasado.
El abogado Fidel Ordoñez Solana informó que, al interponer el amparo ante el juzgado segundo de distrito, espera que María de la Luz Bravo Pagola y Gilberto Martínez Vera sean liberados por la justicia.
Ambos fueron detenidos y acusados de terrorismo con base en el artículo 311 del Código Penal de Veracruz. En sus primeras declaraciones ministeriales, ambos señalaron que habían sido coaccionados y privados ilegalmente de su libertad, además de que se les había negado el acceso a un abogado de su confianza.
Fidel Ordoñez Solana informó en entrevista que reiteró sus señalamientos de abuso de autoridad por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado, que habría violado los artículo 7 y 19 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos suscritos por el gobierno de México en la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
El artículo 7 señala que “nadie será sometido a tortura ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes y, particularmente, nadie será sometido sin su consentimiento a experimentos médicos o científicos”.
A su vez, el artículo 19 establece que nadie puede ser sometido por la justicia a causa de la expresión de sus puntos de vista y garantiza el derecho de las personas a difundir sus opiniones "por escrito o en forma impresa o artística o por cualquier otro procedimiento de su elección".
El abogado recalcó que Gilberto Martínez estuvo "prácticamente secuestrado" durante 100 horas y María de la Luz Bravo padeció la misma situación 90 horas, "sin derecho a hacer una llamada telefónica".
"No son más terroristas que quien avienta una granada"
Ana Vera Marcelis, madre de Gilberto Martínez, acusado de terrorismo y sabotaje por alarmar a la población a través de su cuenta de Twitter, ha recibido muestras de apoyo en su puesto de comida en la ciudad de Veracruz desde el incidente que tiene preso a su hijo.
Ella vende tamales de barbacoa "y uno que otro coctelito" en un puesto en el centro de la capital veracruzana.
El jueves 25 de agosto, su hijo publicó mensajes en su cuenta @gilius_22 , en los que alertaba de supuestos secuestros a niños en una escuela primaria de esa ciudad.
Los usuarios de las redes sociales Twitter y Facebook propagaron la falsa información alertando de secuestros, amenazas de bomba y ataques con armas de fuego desde un helicóptero a una escuela primaria .
Los mensajes desataron una fuerte movilización de padres de familia para sacar a sus hijos de las escuelas. Las autoridades veracruzanas desmintieron los rumores y detuvieron a Gilberto y a María de la Luz Bravo Pagola, un día después.
Ese día, el gobernador de Veracruz, Javier Duarte Ochoa, informó por la mañana en su cuenta @Javier_Duarte que se había localizado el origen de los mensajes y adelantó que se acusaría a los responsables de "terrorismo", según el Código Penal del estado.
El término le suena "muy fuerte" a Ana Vera, de 72 años, quien asegura que está abrumada por la situación de su hijo.
Gilberto es un maestro de matemáticas de 48 años, y da clases en una pequeña empresa educativa privada donde asisten estudiantes que necesitan regularización. "Nunca tuvo una la oportunidad de tener una plaza (un puesto de maestro en el gobierno)", y ahora "él regulariza a los que van mal" en la Academia de la Ciencia, asegura la señora.
Cursó hasta el sexto semestre de Ingeniería y creció, junto a su hermana menor, en un entorno de escasos recursos. Su abogado defensor, Fidel Ordoñez Solana, le ofreció sus servicios de forma gratuita, según su madre.
Ana Vera gasta su dinero "en dar vueltas" al penal de Pacho Viejo, en el municipio de Coatepec (a dos horas y media en autobús desde Veracruz), donde está su hijo.
Asegura que se muestra en aparente calma cuando lo visita. "Lo fui a ver y está tranquilo, sabe que le están poniendo algo que él no hizo. Me ve a mí y se pone tranquilo para que yo esté tranquila", asegura, aunque añade: "Me siento muy triste".
"No son más terroristas que los que aventaron la granada ", dijo al recordar el día en que una persona murió y tres más resultaron lesionadas frente al Acuario de Veracruz, cuando estalló un explosivo lanzado desde un auto en movimiento.
El caso de Gilberto y María de la Luz atrajo la atención de Amnistía Internacional.
El miércoles 31 de agosto, la organización emitió un comunicado en el que exigió que los tribunales respeten el derecho de los tuiteros “a un juicio justo y a su libertad de expresión”, además de revisar la actuación del gobierno de Veracruz.
El abogado y exdiputado local por el partido Convergencia, Sergio Vaca, explicó a CNNMéxico que el Código Penal del estado, a diferencia del Código Federal, excluye dos elementos centrales.
Una característica del terrorismo es que se causa temor a la sociedad, se realizan venganzas o represalias con una finalidad específica, como perjudicar el régimen, atacar al gobierno y no propiamente a los particulares, que serían solo "un medio para ese fin", según el abogado.
El Código Penal de Veracruz, vigente desde enero de 2004, tipifica "terrorismo" como "actos" y no agrega "violentos". Según esa legislación, incurre en terrorismo quien infunde "alarma temor o terror en la población para perturbar la paz pública".