Periodista mexicano que sobrevivió a un ataque habla un año después
"¿Por qué nosotros, ¿por qué?"
Eso es lo que Carlos Sánchez, un fotógrafo del periódico El Diario de Juárez pensaba hace un año, cuando hombres armados no identificados dispararon contra el vehículo en que iba al menos 12 veces.
Tres de las balas impactaron a Carlos, una le rozó en la cabeza, otra en el brazo y otra en el abdomen.
Un año más tarde, sigue afligido por haber perdido a su mejor amigo, Luis Carlos Santiago, quien iba sentado junto a él en el automóvil.
El cuerpo de Carlos Santiago recibió la mayoría de los impactos de los disparos, lo que posiblemente, en el proceso, salvó la vida de su amigo.
Al momento del ataque, Sánchez y Santiago trabajaban como practicantes, con la aspiración de convertirse en reporteros del diario.
El ataque ocurrió mientras los dos amigos estaban sentados en el coche de Carlos de Santiago, en un estacionamiento de un centro comercial en Ciudad Juárez, tomando fotografías de temática urbana.
Sánchez describió aquel día 16 de septiembre de 2010: "Estábamos en el estacionamiento cuando el vehículo se detuvo al lado y luego escuché un fuerte tiroteo, me agaché y sentí mi cabeza caliente. También sentí la humedad en todo mi cuerpo", dijo Sánchez.
Más tarde, se dio cuenta de que la humedad que sentía era la sangre por las heridas de bala. "Hubo varios disparos, por lo que le grité a Luis '¡vámonos!', pero nos fuimos en reversa hasta que el coche se detuvo, luego lo volteé a ver y no me respondió. Su cabeza estaba llena de sangre. Abrí la puerta y corrí hacia el interior del centro comercial".
"En el interior del centro comercial pedí ayuda, porque empecé a ver borroso y me dolía la cabeza, pensé que iba a morir allí mismo", comentó Sánchez.
La ambulancia lo llevó al hospital más cercano, donde lo operaron para quitarle la bala del abdomen. Pasó cinco días allí, durante los cuales pensaba huir a El Paso, Texas. "Pensé en dejar de Juárez para siempre, pero no tengo ni siquiera una visa, por lo que tuve que quedarme a vivir con el temor durante un tiempo," dijo.
A pesar de ver morir a su amigo y sobrevivir al ataque, Sánchez se reincorporó al periódico cinco meses después del incidente.
Aún disfruta el periodismo, comenta, y ahora es un fotógrafo a tiempo completo para un diario que fue galardonado con el premio Maria Moors Cabot, otorgado por la Universidad de Columbia en Nueva York.
Sánchez dijo que aún no está claro por qué fueron atacados; describe su supervivencia como increíble: "Estoy seguro de que el ataque no iba dirigido a mí."
"Desde que ocurrió el ataque, valoro mi vida y trato de pasar más tiempo con mi familia". Sánchez dijo que a pesar del ataque, le gusta trabajar como fotoperiodista.
Los ataques contra periodistas son comunes en México.
En noviembre de 2008, Armando Rodríguez, también reportero de El Diario de Juárez, murió tras ser baleado 11 veces frente a su casa.
La Federación Latinoamericana de Periodistas tiene un récord de 15 periodistas asesinados en 2009, mientras que 14 más fueron asesinados en 2010. Y en lo que va de 2011, al menos ocho periodistas han sido asesinados.