"Después de que te matan a un hijo, ya te arreglaste con lo peor": Sicilia
Javier Sicilia, periodista y escritor, nunca pensó que su vida daría un vuelco hacia el plano internacional cuando asesinaron a su hijo Juan Francisco en marzo pasado.
Pero esta tragedia personal lo llevó a encabezar una serie de caravanas para buscar la paz en México , recorriendo 6,500 kilometros del país.
En una entrevista concedida a la revista Quién , el poeta recordó el último beso que dio a su hijo antes de que lo asesinaran: "Siempre lo besaba. Jugamos una partida de dominó antes de irme a Filipinas al otro día, nos abrazamos, lo besé y ya no lo volví a ver".
Al hablar de su hijo, Sicilia se refirió también a sus padres, que según él eran "progenitores invertidos". De su padre aprendió la vocación de poeta y lo recordó como un hombre "muy maternal".
"Él tenía el don del consuelo, tal vez de ahí me venga el nombre de la Caravana (del Consuelo)", dijo.
A su madre la describió como una mujer fuerte, que lo obliga a enfrentarse a lo que ocurre fuera del espacio poético. La definió como muy "masculina", la persona que lo mantiene informado sobre lo que se dice acerca de él y su caravana.
Colaborador de la revista Proceso, dijo que el Movimiento por la Paz que inició tras la muerte de su hijo le "genera un agobio, o más bien un peso", y que si lo lleva a cabo es por el amor "a mi hijo, a las víctimas y a mi país".
El inicio de esta lucha, hace más de cinco meses, se marcó con las palabras " estamos hasta la madre ", que conoció al concluir la preparatoria, cuando vivió en los cinturones de miseria de la capital mexicana, al lado de los jesuitas.
Sobre su trabajo como poeta, explica que fue Tomás Calvillo quien le mostró que la poesía era un asunto de todos y por ello se decidió a escribir. A pesar de que ha dejado de crear versos por el luto de la muerte de su hijo, asegura seguir "mirando como un poeta".
Sicilia negó tener miedo de que lo maten: "Después de que te matan a un hijo, ya te arreglaste con lo peor. No me importa. Creo que mi vida ya está en paz. Si me matan pues me matan; si no, mejor. Espero que no me maten, pero vivir con miedo no es vivir".
En su camino por el país, el Movimiento por la Paz —en el que participan activistas y organizaciones defensoras de los derechos humanos— ha documentado 512 casos de víctimas de violencia , tanto de parte de delincuentes como de autoridades.
Sicilia exige que el gobierno de Felipe Calderón modifique la estrategia de lucha anticrimen aplicada en México desde diciembre de 2006, así como que preste mayor atención a las víctimas de hechos violentos.