El exalcalde de Monterrey, Adalberto Madero, y un historial de escándalos

Acusaciones por desvío de recursos, extorsiones a empresarios, irregularidades en el otorgamiento de permisos a casinos y la expulsión temporal del partido al que pertenece forman parte del historial polémico del exalcalde de Monterrey, Nuevo León, Adalberto Madero Quiroga (2006-2009), quien quedó detenido el domingo y este lunes salió en libertad bajo fianza.
El exedil fue arrestado por la Agencia Federal de Investigaciones (AFI) cuando estaba en su casa de San Pedro Garza García, para enfrentar cargos de violación a la Ley de Amparo, ya que supuestamente rindió infomes falsos a la autoridad judicial.
Esta detención es la culminación de una serie de escándalos.
En febrero de 2007, el secretario municipal de Tránsito, Javier Pérez Cortés, renunció a su cargo después de que medios locales reportaron que estuvo involucrado en presuntas extorsiones a ciudadanos en operativos antialcohólicos.
La Auditoría Superior de la Federación (ASF) reclamó en marzo de 2008 la devolución de 212 millones de pesos subejercidos del Programa de Apoyos para el Fortalecimiento de las Entidades Federativas, pero el exedil se rehusó a devolverlos.
Auditorías posteriores evidenciaron que recursos obtenidos en los parquímetros de la capital eran desviados, lo que generó el despido de seis funcionarios municipales y la desactivación de los aparatos por casi año y medio.
En septiembre de 2008, organismos de la iniciativa privada publicaron un desplegado en medios impresos en el que denunciaban extorsiones a constructores por parte de funcionarios de la administración de Madero Quiroga.
En abril de 2009, el periódico El Norte reportó que las extorsiones a ciudadanos por agentes de Tránsito de Monterrey sumaban más de 10.5 millones de pesos al mes.
Al finalizar su administración, el edil aprobó la regularización de 779 establecimientos con venta de alcohol. Muchos de estos tenían irregularidades , como señaló a CNNMéxico el regidor comisionado en Alcoholes y Espectáculos, Wilbur Jarím Villarreal Barbarín, de la actual administración (2009-2012), encabezada por Fernando Larrazabal.
"Había una falta de congruencia entre los datos que había en un área de la administración y los (negocios) que en realidad operaban”, mencionó el funcionario.
La administración de Larrazabal ha revocado 1,179 licencias para vender bebidas alcohólicas expedidas durante la administración de Madero Quiroga, de acuerdo con un reporte oficial de octubre de 2009 a septiembre de 2011, proporcionado a CNNMéxico.
Larrazabal denunció públicamente que el casino Royale —donde murieron 52 personas durante un atentado por el crimen organizado el pasado 25 de agosto— fue autorizado durante la administración del exedil.
La Auditoría Superior del Estado de Nuevo León (ASENL) detectó en 2010 irregularidades en las cuentas públicas del municipio que ascendían hasta 34 millones de pesos, según reportaron medios locales.
Sus escándalos valieron para que en febrero de 2011, el Partido Acción Nacional (PAN) —institución política a la que pertenece— lo expulsara de sus filas, pero fue reintegrado a éste después de que impuganara la decisión ante las autoridades electorales.
En octubre de 2009, la organización ciudadana Evolución Mexicana hizo un juicio ciudadano al exacalde. Los cargos imputados fueron el ejercicio indebido o abandono de funciones públicas, delitos patrimoniales de servidores públicos, cohecho, peculado y usurpación de funciones.
"Por la gravedad de sus crímenes contra los ciudadanos, a quienes traicionó su confianza y por el monto de lo conculcado, superior a los 1,300 millones de pesos (cantidad estimada por la organización), ameritaría la pena máxima que por delitos patrimoniales contempla el código penal mexicano, consistente en 15 años de cárcel y la reparación del daño", afirmó Evolución Mexicana.