El levantamiento del EZLN fue por la marginación indígena, afirma Calderón
El levantamiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, en 1995, fue el reflejo de la marginación y la miseria en la que vivieron por siglos los pueblos indígenas del sureste mexicano, aseguró el presidente Felipe Calderón, según Notimex.
Es la primera vez que un mandatario se refiere al tema para reconocer las causas. Tras el gobierno del priista Ernesto Zedillo (1994-2000), cuando surgió el levantamiento en Chiapas, el panista Vicente Fox (2000-2006) dijo que "15 minutos" serían suficientes para dar una solución que permitiera retomar el proceso de pacificación.
El presidente Calderón dijo que los pueblos indígenas son los dueños y poseedores de bosques, selvas y lugares maravillosos "pero, paradójicamente, por razones económicas, culturales, raciales, históricas, han sido durante décadas y siglos también las comunidades más pobres, las más marginadas, las que menos tienen acceso a la educación y salud".
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) declaró la guerra al gobierno de México hace 17 años. Especialistas aseguran que tras el levantamiento, el protagonismo lo han adquirido las comunidades autónomas y no la estructura político militar del EZLN, encabezada por el subcomandante Marcos.
"Hubo aquí mismo en Chiapas, y particularmente aquí, en San Cristóbal de las Casas, una rebelión, un movimiento indígena armado en su principio que, independientemente de no compartir la vía de la violencia para la búsqueda de una causa, cualquiera que esta sea, lo cierto es que fue reflejo de la circunstancia de los pueblos que durante décadas y siglos habían vivido en la marginación y en la miseria", afirmó Calderón.
Durante la inauguración de la Cumbre Mundial de Turismo de Aventura, el presidente de México dijo que urge romper el "círculo vicioso" que representa para muchos indígenas de que la única posibilidad de sobrevivir y alimentar a sus hijos era derribar los árboles, quemar los bosques y sembrar, pero con el tiempo se perdía el bosque y la fertilidad del suelo y solo de destruía la naturaleza y aumentaba la miseria, según la agencia Notimex.
Mencionó que el gobierno solo no puede dotar de ingresos a la gente más pobre para poder preservar esos lugares naturales.
En enero de 1994, miles de indígenas y algunos mestizos de diversas regiones de Chiapas se alzaron en armas para exigir el gobierno de Mexico "libertad, democracia, justicia y paz", demandas planteadas en la llamada Declaración de la Selva Lacandona.
Después de un breve periodo de enfrentamientos armados con el Ejército mexicano, vino —con la intermediación de la sociedad civil— un proceso de diálogo que duró una década, y quedó roto en abril de 2001, por la negativa del gobierno de México a cumplir los Acuerdos de San Andrés, firmados por ambas partes en febrero de 1996.
La autonomía indígena y su reconocimiento constitucional eran la pieza fundamental de los Acuerdos de San Andrés, a partir del rompimiento del diálogo, las comunidades habitadas por milicianos y bases de apoyo del EZLN empezaron la construcción de autonomías de facto en las regiones donde tiene presencia.
Primero, a través de la creación de los "municipios autónomo rebeldes", y posteriormente sustituidos por circunscripciones territoriales llamadas Caracoles zapatistas, regidos a sus vez por las Juntas de Buen Gobierno, explicó en 2003 el Comité Clandestino Revolucionario Indígena, comandancia general del EZLN.