Como líder del G20, México asegura que impulsará a Latinoamérica
Por primera vez desde su creación, el Grupo de los 20 (G20) será presidido por un país latinoamericano. A partir de este 1 de diciembre, México será el encargado de encabezar las negociaciones de uno de los foros con mayor peso en el sistema económico internacional, e impulsar a la región será una de sus metas.
La subsecretaria de Relaciones Exteriores, Lourdes Aranda, explicó que durante su presidencia, México impulsará principalmente dos temas: evitar que la crisis económica europea se contagie a otros países fuera de la región y que dicha crisis no lleve a que el comercio internacional se vea deteriorado como consecuencia de actos proteccionistas.
Asimismo, se buscará dar impulso a la promoción de las economías “verdes” y a temas relacionados con la agricultura y el desarrollo.
El G20 fue creado desde 1999 bajo la iniciativa del exministro de finanzas canadiense, Paul Martin, como un foro de consulta y cooperación en temas relacionados con el sistema financiero internacional.
Fue tras la crisis de 2008 que los países que integran el foro comenzaron a celebrar cumbres de manera regular con el fin de acordar medidas económicas coordinadas. La primera cumbre se celebró en noviembre de 2008 en Washington D.C., Estados Unidos.
En ese entonces, dijo Aranda, los efectos de la desconfianza en los mercados financieros resultaron en la pérdida del empleo y la disminución del crédito, y pusieron en evidencia la necesidad de tomar de decisiones de manera coordinada para que no se aplicaran medidas contradictorias contra la crisis.
El foro lo integran las economías más importantes del mundo, entre las que se encuentran tres países latinoamericanos: México, Argentina y Brasil.
Esta es la segunda ocasión en la que un país con una economía emergente toma la presidencia del G20. El primero en hacerlo fue Corea del Sur, en 2010 .
Para Aranda, que México haya sido designado como presidente de este foro, es parte de un reconocimiento internacional a las economías latinoamericanas, que actualmente han mostrado señales de mayor estabilidad que países como Grecia, España, Irlanda, Portugal o Estados Unidos, que pasan por una crisis como consecuencia de una gran deuda pública.
“Creo que es muy importante porque de alguna manera México puede escuchar las voces de otros países latinoamericanos que no están en este momento representados en el G20”, dijo la subsecretaria mexicana en entrevista con CNNMéxico.
“México, a través de sus amplios contactos que tiene con los diferentes países de América Latina, podrá traer al grupo posiciones de países de menor desarrollo como lo son algunas economías centroamericanas y caribeñas y a otros de mayor desarrollo”, aseguró.
En la última cumbre celebrada el 3 y 4 de noviembre en Cannes, el G20 pudo llegar a pocos acuerdos. Los líderes que acudieron a la Riviera francesa se centraron principalmente en las crisis de Italia y Grecia.
Durante la presentación de las conclusiones de la Cumbre de Cannes en Naciones Unidas, Jean David Lévitte, consejero diplomático del presidente de Francia, detalló que la cooperación y la regulación económica eran dos temas que podían resumir lo alcanzado en Francia.
Antes de la celebración del evento, temas como el cobro de transacciones financieras para dar apoyos a países en vías de desarrollo y la seguridad alimentaria figuraban entre los temas a discutir. Al final, no se pudo alcanzar un acuerdo al respecto.
El G20 es un mecanismo importante no solo para los tomadores de decisiones, sino también para los ciudadanos de a pie, debido a que las medidas acordadas afectan directamente a la situación económica de cada país, dijo Aranda.
“Hay muy poca comprensión sobre el G20 y qué relevancia tiene que México lo tenga. Pero creo que es muy importante recordar la crisis que sufrimos en 2008”, señaló.
Como parte de su presidencia, México será el encargado de organizar una cumbre que cuente con la participación de jefes de Estado y de gobierno, en junio del 2012. Los Cabos, Baja California Sur, fue designado como el lugar sede de dicha reunión.
Por esas fechas, México estará en medio de las campañas presidenciales y países como Estados Unidos, Francia y Rusia, llegarán también en ambiente electoral.
Aranda aseguró que tanto el gobierno mexicano como el G20 cuentan con mecanismos para que las negociaciones no sean interrumpidas por procesos políticos de este tipo.
“Era muy difícil a lo largo del año encontrar una fecha en la que no hubiera elecciones. También en estos momentos hay una consideración de que en estos momentos de crisis no puede permitirse que pase un tiempo tan largo entre reunión y reunión de los líderes porque tenemos que tomar medidas urgentes y no debemos de esperar probablemente todo un año”, señaló.