Los diputados trabajan en una nueva terna de aspirantes para el IFE
El pleno de la Cámara de Diputados aprobó este martes el inicio de un nuevo proceso para elegir a tres consejeros del Instituto Federal Electoral (IFE), luego de que el lunes la Junta de Coordinación Política planteara cerrar el proceso que comenzó hace más de un año .
Tras la aprobación del pleno, la junta trabajará en una nueva terna de aspirantes para someterla a votación. El legislador Armando Ríos Piter, presidente del órgano, dijo que no se descartará a ninguna de las 146 personas que registraron sus aspiraciones en octubre de 2010, ni a otros ciudadanos, reportó la agencia Notimex.
La designación de tres consejeros del IFE, encargado de organizar las elecciones federales en México, está pendiente desde finales del año pasado debido a los desacuerdos entre los partidos políticos.
De los 146 aspirantes, la junta eligió a 17 finalistas y presentó una terna al pleno,que fue rechazada por los diputados del gobernante Partido Acción Nacional (PAN) y del izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD) bajo el argumento de que el Partido Revolucionario Institucional (PRI) intentaba colocar a personas que le son afines.
Para desatorar el proceso, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ordenó recientemente a la Cámara baja que complete el nombramiento a más tardar el 15 de diciembre , cuando termina el periodo ordinario de sesiones, o convoque a un periodo extraordinario.
Ríos Piter afirmó este martes que las negociaciones dentro de la junta están avanzando a fin de concretar una nueva terna antes del jueves, de acuerdo con Notimex.
“Se debe evitar que la designación de los consejeros electorales responda a cuotas partidistas”, dijo. “Que los nombres sean personas de una gran capacidad profesional y trascienda su vida pública cualquier lógica personal”.
Desde octubre de 2010 el IFE trabaja con solo seis de sus nueve consejeros, aunque el instituto afirma que eso no ha paralizado sus actividades . Algunos analistas creen que la ausencia de tres integrantes del organismo y los supuestos vínculos de algunos de sus miembros con los partidos han minado su independencia.