Primer debate del PAN, un "dilema" para sus precandidatos presidenciales
Criticar a sus oponentes para posicionarse en la contienda, o dialogar para mostrar una imagen de unidad dentro del partido, ese es el "dilema" que tendrán este martes los tres precandidatos presidenciales del Partido Acción Nacional (PAN) durante el primero de dos debates oficiales previos a su elección interna del 5 de febrero.
Con Josefina Vázquez Mota como clara puntera en las encuestas de preferencia, Santiago Creel y Ernesto Cordero enfrentan la "tensión" de mantener una imagen sana dentro del partido aunque eso represente que no puedan ahondar en los puntos débiles de su competidora, de acuerdo con analistas consultados por CNNMéxico.
Los precandidatos tendrán cinco intervenciones durante el encuentro, según el formato pactado la semana pasada entre sus equipos de campaña y la dirigencia panista.
En la primera intervención harán una presentación personal y explicarán por qué quieren llegar a la Presidencia. En la segunda expondrán su visión sobre la situación que vive México. La tercera estará dedicada a los retos y oportunidades del país, mientras en la cuarta deberán describir qué futuro buscan para México en el año 2018, cuando terminará el mandato de quien asuma el poder en diciembre próximo. La quinta ronda será para conclusiones.
“Creo que están moviéndose, buscando un equilibrio entre presentarse de manera atractiva para quienes los van a elegir, pero no tan atractiva como para dañar la imagen del partido”, dijo Víctor Reynoso, académico de la Universidad de las Américas (UDLA) y autor del libro Para entender el Partido Acción Nacional.
“Se ha criticado que el formato que se decidió no es el formato de un debate. Ellos van a hacer más bien una presentación de sí mismos y del PAN. Creo que esto tiene su razón de ser: si llegáramos a una confrontación muy abierta, virulenta entre ellos, finalmente su propio partido sería el que saldría dañado. Creo que están buscando, más que un debate, una especie de diálogo entre ellos”, agregó.
José Espina, presidente de la Comisión Nacional de Elecciones del partido, afirmó el viernes en conferencia de prensa que el debate es “una gran oportunidad” para que la militancia panista compare “visiones, propuestas e ideas” de los precandidatos.
Este lunes, Espina señaló que los precandidatos hicieron el “compromiso” de no emitir agresiones ni descalificaciones, reportó la agencia Notimex.
El PAN elegirá a su candidato para las elecciones presidenciales del 1 de julio mediante una elección en la que solo podrá participar su militancia , conformada por alrededor de 1.8 millones de personas. Las encuestas ubican a Vázquez Mota, diputada con licencia y exsecretaria de Educación, como la panista más popular, seguida de Creel, senador con licencia y exsecretario de Gobernación, y de Cordero, exsecretario de Hacienda.
A finales de 2011, en foros organizados por el PAN, Vázquez Mota y Cordero sostuvieron enfrentamientos públicos por el tema de la economía familiar y sus logros como funcionarios. En una ocasión, Vázquez Mota afirmó que Cordero desconoce cuánto dinero necesita una familia para cubrir sus necesidades básicas. En otra, Cordero atribuyó a Vázquez Mota la incapacidad de los diputados del PAN de impulsar las reformas que busca el gobierno del presidente Felipe Calderón.
Entre el interés del precandidato y el partido
En el debate, Cordero y Creel criticarán a Vázquez Mota para mejorar su posición en la contienda interna, previó Nicolás Loza, académico del campus en México de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), aunque consideró que ambos procurarán mantener ciertos límites.
“Estamos ante una contienda que tiene un puntero muy claro y dos desafiantes”, dijo Loza. “Ahora, qué tan rudos sean (en sus críticas), pues es probable que haya cierta rudeza, pero como partido no les conviene. Entonces, es como un dilema entre el interés del partido, que es bastante etéreo, y el interés del precandidato, al que sí le conviene ser rudo. (…) Creo que hay una tensión entre el interés del partido y el interés del precandidato”.
“(Los precandidatos) viven esa tensión: señalar los aspectos que consideran débiles en sus adversarios va a ser una tentación, pero si se exceden pueden dañar al proceso, pueden dañar al partido y a sí mismos”, comentó Reynoso.
El PAN, que gobierna México desde 2000, busca ganar la Presidencia por tercera ocasión, aunque las encuestas dan una ventaja de alrededor de 20 puntos al opositor Partido Revolucionario Institucional (PRI), que ocupó el poder durante 71 años.
Ambos analistas señalaron que el debate puede inferir en la votación de los militantes del PAN el 5 de febrero, aunque aclararon que hasta el momento las preferencias muestran una clara tendencia a favor de Vázquez Mota.
“(El impacto del debate) depende del desempeño de los propios precandidatos. La ventaja de Josefina me parece bastante sólida y clara, y para revertirse se necesitaría un desempeño excepcional en este debate, ya sea para arriba de Cordero y Creel o para abajo de la propia Josefina”, dijo Loza.
A pesar de que las encuestas no le favorecen, Cordero aseguró este lunes que la contienda interna es “bastante pareja”, mientras Vázquez Mota prometió que en el debate se concentrará en “la presentación de propuestas” y Creel afirmó estar “con el ánimo de triunfo, con ánimo de debatir ideas, de explicar soluciones para resolver los problemas de México”.