Cifra de pacientes hospitalizados por influenza, la más alta desde 2009
En 20 días, las personas hospitalizadas en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) por influenza, incluida la cepa A H1N1, pasaron de 15 a 80, la cifra más alta desde octubre de 2009, cuando se registró en el país el mayor número de contagios (90).
Según las cifras del INER, hasta el 25 de enero de este año había 170 casos sospechosos de influenza, la cifra más alta desde diciembre de 2010.
Pero el incremento de pacientes con influenza no es motivo de alarma para el país, dijo el secretario de Salud de México, Salomón Chertorivski, en entrevista con la periodista Carmen Aristegui, en MVS Noticias.
De acuerdo con el funcionario, el aumento en los casos de influenza en el INER o en otras instituciones de salud es "absolutamente normal" durante el periodo invernal.
"Entre octubre y marzo, de manera cotidiana se dan casos de influenza. Este año no es la excepción. Cada año, hay 25 millones de padecimientos respiratorios. De estos, 20,000 responden a síntomas de influenza y solo se confirman entre 5,000 o 7,000", explicó.
CNNMéxico solicitó entrevista con el Secretario de Salud, pero no ha recibido respuesta.
En esta temporada invernal (de octubre de 2011 a marzo de 2012) se han registrado 573 pacientes con influenza tipo A H1N1, de los cuales han muerto 10, informó este domingo la Secretaría de Salud mediante un comunicado.
El promedio anual de muertes por influenza —que incluye la cepa A H1N1— es de 3,500 personas, de acuerdo con la dependencia.
"El H1N1 apareció por primera vez en 2009, pero ya se ha convertido en parte de los casos que aparecen con la influenza estacional y se seguirán viendo estos casos por muchos años más (…) es un virus que regresa en cada periodo de influenza estacional", explicó el secretario a Aristegui.
El seguimiento diario del INER de casos con síntomas de influenza —sin especificar el tipo— muestra que en el primer mes de 2012 ha habido un repunte significativo en cuanto al número de personas hospitalizadas o que han tenido que ser intubadas.
Los pacientes intubados en este hospital por complicaciones de la enfermedad son casi treinta, la cifra más alta desde octubre de 2009, el periodo de mayor alerta por influenza en el país, tras la epidemia del virus H1N1 en abril de ese año.
Según Chertorivski, la inquietud entre la población por el incremento de casos de influenza se da porque ahora "somos mucho más sensibles" al tema, desde la emergencia de hace casi tres años.
"(Es) un comportamiento propio de la temporada invernal y seguirá en circulación como parte del curso natural, por lo que no existen motivos de alarma", informó en el comunicado de este domingo la Secretaría de Salud.
Aunque la dependencia descarta un nuevo brote de contagio , junto con la Secretaría de Educación Pública instaló filtros sanitarios en las escuelas del país.
Salomón Chertorivski detalló que esta medida es exclusivamente preventiva, para que los niños con síntomas de influenza sean llevados con un médico y eviten complicaciones, no porque haya un brote que implique emitir una alerta entre la población.
Escasez de medicamento
Sobre la disponibilidad de medicamento para los casos de influenza A H1N1, Chertorivski dijo que el sistema de salud público tiene suficientes antivirales y agregó que hay una reserva estratégica de 1.4 millones de tratamientos.
En tanto, la Asociación de Distribuidores de Productos Farmacéuticos de la República Mexicana publicó este jueves un desplegado en diarios nacionales donde informó que hay suficiente medicamento antiviral para tratar este padecimiento.
Para esta temporada invernal, la Secretaría de Salud adquirió 22.4 millones de dosis de vacuna contra la influenza —que incluye la cepa H1N1— la cual se puede aplicar en los centros de salud del país desde octubre de 2011.
Los síntomas más comunes de influenza son fiebre mayor a los 39 grados centígrados, tos frecuente e intensa, dolor de cabeza, muscular y de articulaciones, falta de apetito, congestionamiento nasal, estornudos y malestar general.
Las autoridades sanitarias hacen énfasis en evitar automedicarse y asistir con un médico que pueda atender la enfermedad respiratoria.
Entre las medidas preventivas de contagio se encuentran cubrirse boca y nariz con un pañuelo desechable al estornudar o toser —si no hay pañuelo disponible, hacerlo sobre el ángulo interno del codo— lavarse las manos frecuentemente con agua y jabón o gel antiséptico, mantenerse lejos de personas enfermas y evitar saludos de beso o mano.