Supuestos familiares de reos protestan fuera de la prisión de Apodaca
Alrededor de 300 efectivos de la policía federal y de fuerzas militares realizaron un operativo en la prisión de Apodaca ordenado por el gobierno federal para trasladar a reos a cárceles fuera de Nuevo León, informó este martes Jorge Domene, portavoz del Consejo de Seguridad estatal.
“El operativo está dirigido a lograr los objetivos que tiene un ordenamiento federal para trasladar reos fuera de Nuevo León”, precisó Domene.
El vocero informó que la Secretaría de Gobernación fue la que ordenó el operativo y las investigaciones están a cargo de la Procuraduría General de la República.
Más tarde, durante una entrevista televisiva el vocero reveló los nombres de los tres reos que serán trasladados del penal de Apodaca, Nuevo León, al de Puente Grande, Jalisco.
El funcionario estatal informó que los internos son Mario Andrés Alcorta Ríos, alias el Junior; José Francisco Gámiz Vega o Ángel Raúl Hernández, alias el Extraño, y Marcos de León Quiroga, alias el Chabelo, calificado como uno de los de más alta peligrosidad, informó Notimex.
Por la tarde un grupo de personas, supuestamente familiares de reos, protestaron en la entrada del penal donde 44 internos murieron y 30 más se fugaron en una refriega ocurrida el domingo pasado.
Alrededor de 80 mujeres se concentraron a las afueras de la prisión y prendieron fuego a objetos en las rejas del centro de readaptación ante las informaciones de un posible traslado de reos.
Dentro del penal se apreciaba una columna de humo, según imágenes transmitidas por varias cadenas de televisión nacional.
Al filo de las 19:10 horas se escucharon disparos de armas de fuego en el interior y se vio salir una columna de humo.
Jorge Domene aseguró que el penal de Apodaca está bajo control y que el humo que se observó fue provocado por las protestas de los internos que quemaron varios colchones.
Rechazó que se realizaron disparos contra reos y que en las próximas horas se concluirá el ordenamiento federal.
Las inconformes en el exterior pedían información sobre la situación dentro del penal y acusaban a las autoridades de dejar que sus familiares se quemaran. En las transmisiones se apreció a mujeres llorando y gritando, mientras otras arrojaban piedras y objetos contra los agentes antidisturbios. También se pudo ver a menores de edad entre los manifestantes.
Al lugar arribaron policías estatales, federales y militares para contener las manifestaciones.
Las fuerzas de seguridad llegaron al penal para realizar una inspección de rutina, en la que se pretendía ubicar a los reos que serán reubicados a centros de reclusión fuera del estado. “Tenemos que ubicar a las personas que se van a trasladar”, dijo Domene.
También llegaron bomberos y al menos dos ambulancias. Una mujer fue atendida por un golpe recibido en enfrentamientos con los policías.
En las transmisiones se pudo ver camionetas de policías y militares armados, además de un grupo de agentes policiales repeliendo a varias mujeres.
Domene informó el domingo de la muerte de 44 personas durante una riña ocurrida en la madrugada. Un día después, el gobernador Rodrigo Medina de la Mora aseguró que en el incidente se fugaron 30 reos con la ayuda de autoridades penitenciarias.
Las autoridades estatales han sostenido en varias ocasiones que en el penal se encontraban recluidos miembros de los grupos rivales del narcotráfico Los Zetas y del Cártel del Golfo. El incidente ocurrió en una sección del centro de reclusión donde purgan condenas procesados por delitos federales, la mayoría por narcotráfico.
El director y el jefe de seguridad de la cárcel tuvieron un grado de responsabilidad en la fuga de reos, indicó el martes el gobernador Rodrigo Medina.
“No nos vamos a detener, vamos a ejercitar acción penal contra quien sea”, agregó Medina, de acuerdo con Notimex.
La cárcel de Apodaca, de mediana seguridad y dependiente de la administración estatal, presenta una sobrepoblación del 80%, una situación que impera en la mayoría de los centros de rehabilitación del país.
La cárcel de Apodaca tiene una población de 2,752, y una capacidad máxima de 1,500, detalló Domene.
El incidente en Apodaca llamó la atención de Naciones Unidas este martes. La Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos ordenó una investigación independiente del caso, tras asegurar que está alarmada por la muerte de los 44 reclusos.
El gobierno de Nuevo León anunció una recompensa de 10 millones de pesos para quienes brinden información sobre la ubicación de los 30 reclusos fugados.
Los cuerpos de 31 personas fallecidas el domingo ya fueron reclamados por sus familiares, aseguró este martes el vocero de Seguridad estatal, Jorge Domene, según Notimex.
En 2011 un incendio en la sala de psiquiatría del penal de Apodaca cobró la vida de 14 reclusos y causó lesiones a otros 35 internos. Otros incidentes se registraron durante 2011 en penales de Nuevo León, ubicado en el noreste de México, y uno de los que registran mayor actividad de la delincuencia organizada.
Juan Alberto Cedillo y Víctor Badillo contribuyeron a este reporte