Leonardo Valdés: espero amanecer el 2 de julio con la conciencia tranquila
Leonardo Valdés Zurita, consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), tiene un único deseo para la mañana del 2 de julio de 2012: amanecer con la "conciencia tranquila" tras haber anunciado, sin mayores contratiempos, el resultado preliminar de la elección presidencial.
Según el funcionario, la máxima autoridad electoral está preparada para enfrentarse ante cualquier eventualidad e incluso realizar un conteo voto por voto en caso de que el escenario de 2006 —en el que la diferencia entre el candidato del PAN, Felipe Calderón y el del PRD, Andrés Manuel López Obrador, fue menor a un punto porcentual—, se repita.
"Si la diferencia entre el primero y el segundo lugar es de menos de un punto porcentual, y el segundo lugar lo solicita, pues habrá que abrir los paquetes y recontar voto por voto", dijo el consejero presidente en entrevista con CNNMéxico.
En la elección presidencial de hace seis años, el IFE no dio a conocer resultados preliminares la misma noche de los comicios, argumentando que la elección estaba muy cerrada. Finalmente, se le dio el triunfo a Calderón por el 0.56 puntos porcentuales de los votos, lo que derivó en un movimiento de protesta encabezado por López Obrador en el que se exigió un recuento, que finalmente fue negado para la totalidad de las casillas.
Antes de tener un escenario similar, el IFE planea inyectar confianza en el proceso electoral informando qué clase de datos se darán a conocer el mismo día de la jornada.
"(Explicaremos) que los conteos rápidos son ejercicios estadísticos que no producen un resultado preciso de la votación, sino una estimación estadística de un intervalo, un rango de votación que puede oscilar (…) tenemos que educar a nuestros ciudadanos para que conozcan cómo se va construyendo el resultado final", dijo Valdés.
Con esa estrategia, el funcionario dijo que la noche del 1 de julio podrá comunicar a los mexicanos tendencias confiables de votación.
Una ley electoral que le falta madurar
El consejero presidente aseguró que la ley electoral bajo la que se regirá este proceso todavía no es perfecta y requiere modificaciones para establecer "condiciones de equidad más claras".
Después de las tensiones de 2006, entre 2007 y 2008 los principales partidos acordaron aprobar una reforma electoral que buscaba evitar situaciones anteriores. Uno de sus puntos fue nombrar nuevos consejeros del IFE, dado que era necesario sustituir a los integrantes del árbitro electoral porque los de entonces ya no contaban con la confianza de todas las fuerzas políticas.
La reforma prohibió la compra de espacios en radio y televisión para hacer propaganda, otorgó al IFE el control de los tiempos de los partidos en los medios electrónicos, prohibió los mensajes denigrantes en las campañas políticas y creó un mecanismo para que el instituto atienda rápidamente las quejas por presuntas violaciones a la ley en la materia, conocido como procedimiento especial sancionador.
"Al IFE no le importa el resultado de la elección, lo que le importa es que se construya el resultado de acuerdo con la ley, que se aplique la ley en cada plazo, en cada decisión y que esto nos permita a todos saber que los votos se cuentan, se cuentan bien y cuentan de manera fundamental en el resultado".
Valdés dijo que a ley electoral ha avanzado lo suficiente para que los derechos políticos de los ciudadanos se ejerzan a plenitud, pero todavía falta un "andamiaje institucional que permita que las contiendas políticas se realicen en un marco de equidad, y se pueda evitar la intervención de los funcionarios públicos y tener mejores sistemas para sancionar cuando no se acate la ley".
Con la confianza minada
Leonardo Valdés reconoció que de cara a la elección presidencial, el IFE no está en su mejor momento de confianza entre la ciudadanía , aunque consideró que esto es parte del fortalecimiento democrático del país que deriva en ciudadanos más críticos y participativos.
Recientemente, el IFE ha sido cuestionado por la aprobación de un bono equivalente a dos meses de salario bruto de cada uno de sus funcionarios. Valdés Zurita dijo que esta es una prestación extraordinaria que otorga la ley.
"El código electoral establece que en virtud de que todos los días y todas las horas son hábiles (durante el proceso electoral), el instituto debe otorgarle a sus trabajadores una compensación extraordinaria (…). Si en lugar de entregar esa compensación se le pagara horas extras al personal que labora en la institución, el presupuesto no alcanzaría".
El voto de mexicanos en el extranjero
La entrevista con Valdés Zurita contó con la participación de usuarios de Twitter que enviaron sus preguntas a CNNMéxico.
Una ellas cuestionaba el por qué no fue tan eficiente el registro de mexicanos en el extranjero para la votación de julio, a lo que el consejero presidente dijo que el modelo jurídico es "extraordinariamente limitado" y con muchos candados.
"Solamente puede registrarse si lo hace antes del 15 de enero, y el 15 de enero del año de la elección, todavía no hay candidatos, todavía no hay plataformas políticas, todavía no hay campañas.
"Lo más atractivo del proceso electoral todavía no está en marcha y con mucha anticipación se tiene que registrar el ciudadano. (…) ese modelo se tiene que reformar, se tiene que modificar profunda y radicalmente", dijo Valdés.
Menos del 1% de los mexicanos que residen en el extranjero se inscribió para votar en los próximos comicios federales del 1 de julio pese a la campaña mediática que llevó a cabo el IFE en consulados, representaciones diplomáticas y medios de comunicación.
La autoridad electoral registró un total de 61,687 mexicanos que completaron el proceso para votar desde el exterior. Lo que representa el 0.52% de los connacionales en el extranjero, según la última cifra del Instituto de Mexicanos en el Exterior (IME), que es de 11 millones 649,991.