De nuevo, el IFE aprueba un conteo rápido en la elección presidencial
El Instituto Federal Electoral (IFE) aprobó el miércoles un nuevo acuerdo para realizar un conteo rápido que permita conocer las tendencias de los resultados de la elección presidencial, la noche del 1 de julio.
Un primer proyecto fue avalado por el IFE en marzo , pero el documento fue impugnado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y revocado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) a principios de mayo.
En su fallo, el TEPJF respaldó la queja del PRD en el sentido de que el conteo rápido, como estaba planteado, era poco claro en su diseño y podría generar incertidumbre en las elecciones.
La mayoría de los consejeros del IFE —ocho de nueve— consideró que el nuevo acuerdo “subsana” las faltas que el TEPJF había señalado en el texto anterior. Ambos documentos fueron presentados por el consejero presidente, Leonardo Valdés Zurita.
El proyecto establece la creación de un comité técnico asesor que supervisará el conteo rápido. El organismo deberá elaborar una metodología que permita extraer una muestra de todas las casillas instaladas, para que con base en sus actas de escrutinio se conozcan las tendencias de la elección presidencial a partir de las 23:00 horas del 1 de julio. Las casillas cerrarán a las 18:00 horas (tiempo del centro de México).
“El diseño muestral que a efecto determine el comité técnico asesor se apegará a los siguientes criterios normativos: tendrá la mayor cobertura posible; incorporará todos los distritos electorales; abarcará la mayor dispersión geográfica posible. Asegurará estimaciones de los resultados de las tendencias de la votación para la elección de presidente (…) con un nivel de confianza de al menos un 95%, y una precisión de al menos 0.5%”, indica el documento.
Los integrantes del comité son los mismos expertos en matemáticas y estadística que habían sido propuestos en el primer proyecto: Guillermina Eslava Gómez, de la Facultad de Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); Patricia Romero Mares y Raúl Rueda Díaz del Campo, del Departamento de Probabilidad y Estadística de la UNAM; y Rubén Hernández Cid y Manuel Mendoza Ramírez, del Departamento de Estadística del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM).
Valdés Zurita defendió el conteo rápido bajo el argumento que su objetivo es generar certeza en la elección. También afirmó que su propósito es distinto al del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), que no se conforma por una muestra sino por el conteo total de votos.
El consejero Francisco Guerrero, el único que votó en contra del proyecto, dijo que el conteo rápido “está acompañado por un grado de incertidumbre”, por lo que puede afectar los comicios.
“Nada generaría mayor incertidumbre el día de la elección que el silencio del Instituto Federal Electoral”, respondió el consejero Sergio García Ramírez.
Camerino Eleazar Márquez, representante del PRD, y el senador perredista Pablo Gómez, representante del Poder Legislativo, advirtieron que su partido volverá a impugnar el conteo rápido ante el Tribunal Electoral.
“Nos asiste el derecho legítimo para recurrir (al TEPJF)”, dijo Márquez, quien insistió en que el conteo rápido generará dudas sobre el proceso electoral el día de la votación.
