El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos urgió este martes a Estados Unidos a facilitar y cooperar con la investigación de las muertes de inmigrantes mexicanos ocurridas cerca de la frontera entre ambos países en los dos últimos años, algunas de ellas a manos de la Patrulla Fronteriza.
Durante una rueda de prensa en Ginebra, el vocero del organismo, Rupert Colville, pidió a Washington “que facilite la investigación de todos los casos y coopere con las autoridades mexicanas”.
Luego de que la justicia estadounidense cerró el caso del asesinato del joven mexicano Adrián Hernández Güereca, de 15 años,
"Estamos preocupados porque de ser así no hay posibilidad de investigar este crimen en ningún lugar", dijo Colville. “Cualquier instancia básica debe facilitar su investigación, especialmente cuando se denuncia que (el asesinato) fue perpetrado por un agente estatal", agregó el vocero.
El Departamento de Justicia decidió abstenerse de formular cargos penales contra el agente que efectuó el disparo, en tanto que
Colville recordó que hay otros casos donde inmigrantes han muerto a manos de agentes estadounidenses. "Hemos recibido denuncias del uso excesivo de la fuerza por parte de guardias fronterizos en acciones para hacer respetar las normas migratorias y esto incluye la muerte de ciudadanos mexicanos", dijo el vocero.
El Alto Comisionado para los Derechos Humanos "urge a Estados Unidos que garantice que el comportamiento de su Patrulla Fronteriza se ajusta totalmente a los estándares internacionales aplicables a todo empleado estatal responsable del cumplimiento de una normativa", agregó Coville.
Otros incidentes
En enero de 2007, el mexicano Francisco Javier Domínguez fue muerto a tiros por un agente en Naco, Arizona.
El 8 agosto del mismo año, el mexicano José Alejandro Ortiz murió tras ser baleado por un agente de la patrulla fronteriza en El Paso, Texas.
En tanto,