El PRD impulsará reformas contra "el agotamiento del régimen político"
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) aprobó este sábado los ejes de su agenda para la próxima Legislatura, entre los que está impulsar más sanciones contra la corrupción y reformas electorales que contrarresten lo que el perredismo describe como “el agotamiento del régimen político” en México.
Durante su octavo Consejo Nacional, el PRD acordó que su agenda legislativa tenga ocho ejes: rendición de cuentas, transparencia y combate a la corrupción; nueva economía, desarrollo sustentable y soberanía energética; libertades y transversalización de los derechos humanos; seguridad, procuración e impartición de justicia; nuevo régimen político; Estado social y democrático de derecho; educación, ciencia y tecnología para el desarrollo, y nueva relación con el mundo.
En materia de política, el PRD plantea nuevas reformas electorales para eliminar el “uso propagandístico” de las encuestas en época de comicios, castigar con sanciones electorales la inducción del voto a través de dinero, que los sufragios nulos tengan un valor jurídico y disminuir la cantidad de spots en campañas, según el documento aprobado durante la sesión.
Al lado de los partidos del Trabajo (PT) y Movimiento Ciudadano, el PRD postuló como candidato presidencial a Andrés Manuel López Obrador , quien quedó en el segundo lugar de las votaciones, según el conteo del Instituto Federal Electoral (IFE).
La coalición de izquierda Movimiento Progresista, sin embargo, impugnó los resultados bajo el argumento de que el virtual ganador, Enrique Peña Nieto , del Partido Revolucionario Institucional (PRI), incurrió en irregularidades como rebasar el tope de gastos de campaña y comprar votos, señalamientos que el priista niega.
El PRD —que será la tercera fuerza en el Senado y la Cámara de Diputados, con 22 y 101 asientos, respectivamente— también acordó impulsar iniciativas para “democratizar” a los medios de comunicación, una demanda que comparte el movimiento estudiantil #YoSoy132, que se define como anti-Peña Nieto.
Los integrantes de ese colectivo consideran que las principales cadenas de televisión del país, Televisa y TV Azteca, apoyaron a Peña Nieto mediante la entrega de publicidad y coberturas informativas parciales.
“Debe también renovarse de manera integral la regulación de los medios de comunicación favoreciendo su democratización y diversificación para garantizar la presencia equitativa del Estado, la sociedad civil y la iniciativa privada, desterrando los monopolios y las prácticas dirigidas a influir indebidamente en las preferencias políticas ciudadanas, y facilitando el acceso de los pueblos y comunidades indígenas a la operación de medios comunitarios”, señala el documento del PRD.
Los detalles de la agenda legislativa del perredismo, así como la designación de sus coordinadores parlamentarios en ambas cámaras, se revisarán en una sesión con legisladores electos el 7 y 8 de agosto.
En materia de transparencia, el PRD plantea dotar de más facultades y autonomía a órganos como la Auditoría Superior de la Federación (ASF), a fin de que tenga más herramientas para perseguir y sancionar con penas “más severas” delitos de corrupción.
Para la política de seguridad, propondrá que el Congreso tenga más poderes para revisar la estrategia anticrimen del gobierno federal, mientras que en energía prevé oponerse a iniciativas para privatizar el sector y, en el área de salud, impulsará la cobertura universal de seguridad social.
Antes del consejo, el dirigente del PRD, Jesús Zambrano, declaró a periodistas que el Movimiento Progresista respalda a López Obrador en su exigencia de que el Tribunal Electoral federal invalide los comicios presidenciales, pero aclaró que el perredismo mantendrá su agenda sin importar cuál sea el fallo.
“Tengan por seguro que nosotros vamos a poner por delante nuestra lucha por una agenda nacional que atienda los problemas del país”, dijo.
“Cualquiera que sean las circunstancias en las que se decida la elección, en las que se decida la sentencia del tribunal, vamos a seguir trabajando para fortalecer el proyecto de izquierda y por hacer valer el peso que hoy tenemos, que tendremos en la próxima Legislatura, que tendremos en los próximos gobiernos, a hacer valer todo eso a favor de la gente. En eso, no vamos a quitar el dedo del renglón”, agregó.
El Tribunal Electoral debe emitir su dictamen de validez de la elección del 1 de julio a más tardar el 6 de septiembre. De invalidar los comicios, tendrá que llamar a votaciones extraordinarias, en tanto que de avalarlos declarará a Peña Nieto presidente electo. Los legisladores recién electos iniciarán funciones el 1 de septiembre.
