Marcelo Ebrard traza su "ruta" para competir por la presidencia en 2018
Marcelo Ebrard, jefe de gobierno de la Ciudad de México, adelantó los principales elementos de la “ruta” que seguirá a partir de diciembre próximo, cuando deje el cargo e inicie su búsqueda de la Presidencia de la República en las elecciones de 2018.
El funcionario señaló que ese camino se compone de dos puntos: impulsar la conformación de un “frente amplio” de los partidos de izquierda para competir en esos comicios y construir una propuesta que pueda convencer a más ciudadanos.
“Yo tengo que empezar en diciembre una ruta que lleve a que podamos competir y triunfar en la siguiente elección presidencial. Falta mucho, pero hay que empezar”, dijo Ebrard este martes en entrevista con la emisora Radiofórmula.
Las declaraciones se produjeron dos días después de que el excandidato presidencial de la izquierda, Andrés Manuel López Obrador, anunciara que se separará de la coalición Movimiento Progresista y analizará conformar su propio partido, una decisión que ha generado numerosas reacciones en el bloque.
En 2011, Ebrard compitió con López Obrador por la candidatura de la izquierda, que postularon los partidos de la Revolución Democrática (PRD), del Trabajo (PT) y Movimiento Ciudadano.
Ebrard perdió entonces la nominación frente a López Obrador, aceptó los resultados para no dividir al bloque y, ahora, calificó de “previsible” la decisión de su exrival de separarse del Movimiento Progresista y analizar conformar su propia fuerza política, mediante la asociación Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
López Obrador hizo el anuncio el domingo pasado en el Zócalo del Distrito Federal, poco más de una semana después de que el Tribunal Electoral confirmara su derrota ante Enrique Peña Nieto , del Partido Revolucionario Institucional (PRI), en los comicios presidenciales. El exabanderado, sin embargo, no reconoce los resultados.
“Era lo previsible. Morena es una organización que se ha venido formando estos últimos años, ya incluso formalizada o semiformalizada, para que entonces el siguiente paso que se vaya a dar, como lo dijo Andrés Manuel en el Zócalo el domingo, todo parece indicar que va a ser un partido político... era previsible”, dijo Ebrard.
“Ahora la cuestión es (…) si los partidos de las izquierdas de México, que son en este momento tres, PRD, Movimiento Ciudadano y PT, se van a mantener cohesionados en las Cámaras y en las elecciones. Y en su momento, cuando esté Morena, si es que sigue este curso y es un nuevo partido, si va a participar en este nuevo frente amplio de izquierda o no. Porque si hay división en ese nivel, lo que estaría de por medio (es) qué sucedería con los 15.8 millones de ciudadanos que votaron por una opción de izquierda”, agregó.
Militante del PRD, Ebrard aseguró que además de buscar mantener unidas a las otras fuerzas de izquierda, su partido debe realizar “muchos cambios” para fortalecer su organización interna.
También señaló que en 2018 la izquierda debe optar por el candidato más competitivo —independientemente de quién sea— e incluso mencionó como prospecto a quien será su sucesor en el gobierno capitalino, el exprocurador Miguel Ángel Mancera.
“No hay que hacerlo de lado, sería un error. Miguel Ángel Mancera va a ser jefe de gobierno de la ciudad y seguramente va a tener un buen desempeño y podrá ser precandidato, y habrá que ver qué decisión y posibilidades tiene… si el mejor candidato llega a ser, en el 2017, Miguel Ángel Mancera, entonces que él lo sea”, dijo Ebrard.
El pronunciamiento del jefe de gobierno ocurre en momentos en que el PRD intenta hacer un control de daños por el anuncio de López Obrador, a pesar de que este sostiene que la separación se dio "en los mejores términos".
La dirigencia perredista asegura que no habrá una "desbandada" del partido hacia las filas de Morena, aunque sus integrantes han llamado a hacer ajustes para fortalecer al perredismo, principal fuerza política de la izquierda.
Tras los comicios de este año, los partidos de Movimiento Progresista perdieron el gobierno del estado de Chiapas, pero retuvieron la capital y arrebataron al PRI y al Partido Acción Nacional (PAN) las entidades de Tabasco y Morelos, respectivamente. En el Senado en conjunto quedaron como la tercera fuerza, mientras representan la segunda en la Cámara de Diputados.