Besos, juegos de iPad y un legislador 'Angry Bird', en la reforma laboral
Cristales rotos, besos, un juego de iPad, fatiga crónica e inundaciones. ¿Los ingredientes de la próxima comedia de Woody Allen? Podría ser. Pero de hecho son situaciones que han acompañado el proceso de aprobación de la reforma laboral, en el Congreso mexicano.
Un video que circuló en redes sociales mostró a la senadora Layda Sansores, del partido de izquierda Movimiento Ciudadano, jugando Diamond Mine en su iPad el martes pasado, al tiempo en que transcurría la discusión legislativa.
Mientras Sansores se entretenía con el dispositivo electrónico, en el video se escucha la intervención de otro legislador en el pleno. En Twitter, la difusión del material causó que la senadora se convirtiera en trending topic, y en blanco de críticas.
"Llega un momento en que el cansancio hace cometer distracciones. Pero no agredo a nadie, y no estoy viendo pornografía, estoy viendo un jueguito de mi nieta, que estoy viendo de qué se trata, para jugar con ella”, comentó Sansores a CNNMéxico.
Le senadora admitió que había sido un error jugar con la iPad, y pidió una disculpa al orador al que no le prestó atención, por estar más enfocada en alinear diamantes y ganar puntos.
Pero también mencionó que algunos medios habían sacado las imágenes de contexto, porque "ya llevaba 17 horas" de sesión, sin desayunar ni comer, y tomando poca agua, para no ir al baño. Así que en algún momento buscó una distracción.
Sansores reconoció que llegó a votar uno de los puntos de la reforma sin dejar de ver su iPad, para luego criticar que los debates en el senado o en la Cámara de Diputados se han convertido en "montaje teatral", donde está definida de antemano la postura de cada fuerza política.
“Por eso terminan muchas veces los diputados o senadores tomando la tribuna, porque debatir no tiene ningún sentido”, expresó Sansores. “¿Para qué debatimos si esto ya viene cocinado, cocinado desde allende nuestras fronteras, o cocinado desde Los Pinos, o desde la guarida del señor Peña?”, cuestionó.
En la entrevista, Sansores comentó que “hay una especie de Big Brother” en el Senado, o “una especie de espionaje”, con fotografías que “están promoviendo desde la oficina” de Emilio Gamboa, coordinador de los senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), y presidente de la Junta de Coordinación Política, para que lleguen a los periodistas.
“No creo que sea él capaz de dar esta instrucción”, dijo Sansores. “Pero en su equipo hay gente que tiene también muchos intereses”, y puede tratarse de una “vendetta política”, por el rumbo que tomó la reforma laboral, apuntó.
El portal AnimalPolitico.com indicó que uno de sus reporteros captó el video del iPad y el Diamond Mine. En tanto, Sansores insistió en que el "espionaje" provenía del propio Senado, y pidió que "no se invada su privacidad", ni estén tomando partes de su cuerpo, porque son situaciones "que te lastiman en tu condición de mujer".
Medios de comunicación mexicanos y usuarios de redes sociales también difundieron una fotografía en la que se observa a la senadora Mariana Gómez del Campo, del Partido Acción Nacional (PAN), besar a un hombre en las instalaciones legislativas.
La encargada de atención a medios de Gómez del Campo confirmó a CNNMéxico que ese momento romántico entre la senadora y su novio, el empresario Eduardo Solórzano, ocurrió el martes pasado, durante un receso en las discusiones sobre la reforma.
Días antes, durante una de las sesiones de la Comisión del Trabajo, en la Cámara de Diputados, el diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), Martí Batres, tuvo un “encuentro desafortunado”.
La prisa por llegar al tiempo y pasar lista en el salón de plenos, causó que el legislador chocara con una puerta de cristal “muy transparente”, y que sufriera heridas en una mano y en una pierna. Nada de gravedad. Pero el hecho no pasó de largo en las redes sociales, donde lo compararon con un Angry Bird.
Aquel 28 de septiembre también cayó una tormenta, que inundó la parte baja del edificio donde sesionaba la Comisión del Trabajo. Esa situación impidió durante unos minutos que los legisladores continuaran con la discusión del tema, después del receso que produjo el cristalazo de Batres.
Y ahí no terminó la cadena de infortunios. El presidente de la Comisión del Trabajo, Carlos Aceves del Olmo, comenzó a sentirse mareado, así que acudió a recibir atención. Los trasladaron en silla de ruedas al Servicio Médico. Y la sesión se pospuso de nuevo.
"Lo que tiene el diputado es fatiga crónica, una ligera baja de presión, no hubo colapso alguno”, comentó Gustavo Acevedo, médico de la Cámara, de acuerdo con ADNPolitico.com.
Con todo, la reforma laboral siguió su camino. Y ahora los diputados deben analizar las modificaciones que hizo el Senado a la minuta, entre las que se incluye el tema de la transparencia y la democracia sindical.