Madres de migrantes encaran a funcionarios de Migración en Puebla
Madres de migrantes centroamericanos desaparecidos en México acusaron este viernes al Instituto Nacional de Migración (INM), en su sede en Puebla, de participar en abusos, extorsiones y secuestros cometidos contra los viajeros en su paso hacia Estados Unidos.
“¿Por qué el gobierno mexicano ha permitido tantos secuestros? ¿Por qué las autoridades abusan de nuestros migrantes? Ellos no quieren quedarse en México, ellos no les están quitando nada a los mexicanos, ellos solo van de paso, pero los tratan como si fuera esclavos", cuestionó Carmen Lucía Cuarezma, originaria de Nicaragua, a Nancy Flores, Jaime Macip Gelly y Felipe Arguello, subdelegados del INM en Puebla, en el centro del país.
Los funcionarios federales se reunieron en privado con representantes de las madres de migrantes de Honduras, El Salvador, Nicaragua y Guatemala que viajan en la caravana Liberando la Esperanza , luego de que realizaran una manifestación afuera de las instalaciones del INM en esa entidad.
En la reunión, las mujeres dijeron que los migrantes que llegan a México denuncian constantemente abusos y secuestros en su contra por parte de agentes del INM. “Ellos vienen a buscar un nuevo futuro, no es justo que los secuestren, que los maten y los entreguen a las pandillas”, señaló Carmen Lucía.
Karen Núñez, representante de Honduras, dijo a los funcionarios que solo en lo que va del 2012 han sido deportados 4,700 hondureños desde México, “y la mayoría denunciaron que fueron abusado por agentes de migración y policías federales”.
Macip Gelly pidió a las madres de migrantes “una disculpa por el mal comportamiento de algunos integrantes del personal del Instituto. Falta mucho por hacer, sabemos que hay quienes cometen actos de corrupción, como ustedes dicen, pero se hacen cambios para proteger los derechos de los migrantes. Estamos en ese camino, es a través de la ley de migración van a haber reformas en beneficio de los migrantes.”.
Dijo que todos los agentes y servidores del INM en Puebla han cursado talleres sobre protección a los derechos humanos y les informó a las integrantes de la caravana Liberando la Esperanza, que el INM está en disposición de colaborar en la localización de sus familiares.
Karen Núñez insistió a los subdelegados en que si realmente quieren combatir la corrupción en el INM, “que empiecen por arriba, porque de nada sirve si no combaten en donde realmente está la corrupción. Nosotros vemos que ustedes no tienen un control de lo que pasa contra los migrantes”, afirmó.
La representante de Nicaragua, Paola Bolñesi, dijo a los subdelegados que “lo que le hacen a los migrantes” tiene repercusiones internacionales que afectan “la imagen de México” y muestra las fallas en procuración de los derechos humanos.
Las integrantes de la caravana han recorrido nueve de los 14 estados de la República Mexicana donde buscan a sus familiares. Esta tarde llegaron a la comunidad de Lechería, en el Estado de México, donde pidieron reabrir el albergue San Juan Diego, cerrado hace cuatro meses por las protestas de los vecinos de ese lugar.
La caravana inició en Tenosique, Tabasco, uno de las principales entradas de los migrantes a México y siguió por los estados que forman la ruta de los migrantes en México, como Veracruz, Tamaulipas y Coahuila.
Según el Informe Especial sobre Secuestro de Migrantes en México de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) desde 2008 se han registrado más de 21,000 secuestros. Entre septiembre de 2008 y febrero de 2009, un total de 9,758 migrantes fueron secuestrados, dejando un beneficio de unos 25 millones de dólares a los plagiarios, de acuerdo con el análisis de la CNDH.
En el informe de 2011, la comisión detalla que entre abril y septiembre de 2010, es decir, en un lapso de seis meses, 11,333 migrantes fueron plagiados en solo 214 "eventos de secuestro". Lo cual confirma la existencia de secuestros masivos en las vías del tren por donde viajan los centroamericanos.
La marcha es organizada por la organización Movimiento Migrante Mesoamericano y varios sacerdotes católicos que están a cargo de albergues de migrantes en lugares ubicados dentro de la ruta migratoria.