El Senado avala con cambios la reforma educativa y la regresa a diputados
La iniciativa de reforma educativa quedó aprobada en los primeros minutos de este viernes en lo general y en lo particular por el Senado mexicano, que hizo algunas modificaciones al documento previamente avalado por los diputados.
Por ello, la reforma a los artículos tercero y 73 constitucionales tendrá que regresar a la Cámara baja para una nueva revisión.
El Senado determinó añadir a la reforma el concepto de “calidad de la educación”, así como que el Estado tenga la obligación de garantizarla. La Cámara alta también incluyó que los gobiernos tendrán que trabajar con padres de familia y profesores en la elaboración de los planes y programas de estudio.
Antes de la sesión del jueves, los senadores Raúl Gracia, del Partido Acción Nacional (PAN), y Benjamín Robles, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), dijeron en entrevistas por separado que había consenso entre sus bancadas y la del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para concretar esos cambios.
La reforma fue dictaminada en el Senado y llevada al pleno pocas horas después de que fuera aprobada por los diputados . Ahora que el documento regresará a la Cámara baja, ésta deberá definir si acepta las modificaciones o no.
Si lo hace, enviará la reforma a los congresos estatales para su análisis. Debido a que el documento implica cambios a la Constitución, para entrar en vigor necesita el aval de al menos 17 Legislativos locales.
Entre otros puntos, la reforma establece la creación de un sistema profesional docente y que las plazas de profesor sean asignadas por el Estado a partir de evaluaciones obligatorias.
La medida ha generado molestia en el sindicato magisterial, encabezado por Elba Esther Gordillo, quien considera a la reforma educativa una “amenaza” para los docentes y este jueves los llamó a realizar protestas “pacíficas” en su contra.
El secretario de Educación, Emilio Chuayffet, niega que la reforma vaya a poner en riesgo las plazas de los profesores.
La reforma también da autonomía constitucional al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), que sería dirigido por una junta de gobierno conformada por cinco integrantes, propuestos por el presidente y ratificados por el Senado.
Además, se obliga al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) a llevar a cabo un censo de escuelas, maestros y alumnos, y a las autoridades a prohibir en los planteles los alimentos “que no favorezcan la salud” de los estudiantes.
Durante la discusión en lo general, senadores del PRI y del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) aplaudieron la reforma, en tanto algunos del PAN y del PRD la consideraron positiva pero todavía insuficiente para resolver el rezago educativo.
En contraste, algunos perredistas e integrantes del Partido del Trabajo (PT) la rechazaron argumentando que no atiende problemas de fondo.
La reforma fue presentada al Congreso el pasado 10 de diciembre por el presidente Enrique Peña Nieto, con el apoyo de la dirigencia de su partido, el PRI, y de los líderes del PAN y del PRD. Las tres fuerzas firmaron el 2 de diciembre el Pacto por México, un convenio por el que se comprometieron a impulsar cambios legislativos que asumen como indispensables para el país.