Sandra Ávila se declara culpable de ayudar a un narcotraficante en EU
La mexicana Sandra Ávila Beltrán se declaró culpable del delito de asistencia económica a un narcotraficante convicto ante un tribunal de Estados Unidos, una declaración que forma parte de un acuerdo con las autoridades judiciales de ese país.
Ávila aceptó el cargo en una audiencia de 30 minutos en la que estuvo acompañada de sus abogados ante el juez Michael Moore, quien fijó para el próximo 25 de julio su audiencia de sentencia.
La llamada Reina del Pacífico aceptó haber brindado "asesoría" a su pareja sentimental, el colombiano Juan Diego Espinosa Ramírez El Tigre, quien fuera considerado uno de los enlaces más importantes del cártel de Sinaloa mexicano con el del Norte del Valle (Colombia).
Extraditado desde México en 2009 luego de dos años en prisión, Espinosa Ramírez se declaró culpable en un tribunal federal de Miami de conspiración para distribuir cocaína y cumplirá su condena en septiembre de este año.
Con el acuerdo, Sandra Ávila evitó ir a un juicio que se había fijado para el 5 de mayo y en el que hubiera tenido que enfrentar el cargo de asociación ilícita para importar y distribuir cocaína en Estados Unidos.
En otra audiencia del 14 de septiembre pasado, Ávila Beltrán se declaró "no culpable" de dos acusaciones de tráfico de drogas que los fiscales interpusieron ante el juez.
De esta forma, Ávila Beltrán, de 52 años, extraditada desde México el 9 de agosto de 2012, podría quedar en libertad en breve, pues entre México y Estados Unidos ha cumplido ya 63 meses de reclusión, según explicó su abogado Stephen Ralls.
La pauta para el delito del que se declaró culpable de "asesoría después de un hecho" pide de 51 a 71 meses de prisión, pero el juez puede incrementar la pena si encuentra alguna razón, afirmó el abogado.
"Es una resolución justa bajo las actuales circunstancias (...) Ella está contenta con el resultado y espera pronto poder reunirse con su familia", dijo Ralls.
El abogado manifestó que fueron meses de "difíciles negociaciones" con la fiscalía y que en ningún momento su cliente aceptó cooperar con el gobierno estadounidense.
El acuerdo llegó luego de una moción presentada por los abogados de Ávila en el sentido de que Estados Unidos incurrió "en falsedades" para extraditarla.