El "liderazgo despiadado" del 'Z-40' llegó a su fin, según la DEA
Miguel Ángel Treviño, El Z-40, ejercía un "liderazgo despiadado" al frente de la organización delictiva de Los Zetas, el cual terminó con su captura por las autoridades mexicanas, afirmó la Administración de Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), que este martes felicitó al gobierno de México por el operativo.
"Treviño Morales, el jefe del notoriamente violento y cruel del cártel de Los Zetas, era buscado desde hace muchos años”, indica la DEA en un comunicado; y ahora, "gracias a los valientes hombres y mujeres del gobierno de México", el capo "tendrá que rendir cuentas por sus crímenes".
"Su liderazgo despiadado ha llegado ahora a su fin", agrega la DEA.
El arresto del Z-40 es uno de los más importantes en varios años, según la agencia, que agregó que continuará apoyando a México en sus intentos por desmantelar las organizaciones del tráfico de drogas.
En el mismo sentido, la embajada de Estados Unidos en México felicitó la noche de este lunes al gobierno y al pueblo mexicano por el operativo militar que llevó a la captura de Treviño.
"La exitosa captura de Miguel Ángel Treviño, supuesto líder de Los Zetas", representa "un gran golpe en contra del crimen organizado", afirmó la embajada a través de su cuenta de Twitter.
Un vocero del gobierno federal informó este lunes que Treviño fue ubicado por un helicóptero de la Secretaría de Marina a unos 27 kilómetros a las afueras de Nuevo Laredo, Tamaulipas, la madrugada de este lunes, luego de una operación de inteligencia de varios meses, pero no aclaró si hubo colaboración en estas acciones con el gobierno de Estados Unidos ni si existe una probabilidad de extradición del jefe máximo de Los Zetas.
Eduardo Sánchez, vocero de seguridad del gobierno federal, dijo que el helicóptero realizó una maniobra que permitió detener el vehículo en el que se transportaba Treviño acompañado de otras dos personas.
Treviño fue hasta la muerte de Heriberto Lazcano Lazcano, El Lazca, el número dos en el grupo delictivo, y se encontraba entre los capos más buscados en ambos lados de la frontera, según la Procuraduría General de la República (PGR).
A diferencia de los otros fundadores de Los Zetas —que eran militares de las fuerzas especiales del Ejército que desertaron para brindar protección al Cártel del Golfo—, Treviño no tenía instrucción militar, según el Departamento de Estado de Estados Unidos, que ofrecía 5 millones de dólares por información que llevara a su captura.
Desde 2008, Treviño es requerido por una corte del Distrito de Columbia, que lo acusa de narcotráfico. En junio del año pasado, fue acusado por una corte de Texas de cargos de lavado de dinero a través de carreras de caballo.