Un tribunal de Malasia ratifica la pena de muerte para tres mexicanos
El Tribunal de Apelaciones de Malasia confirmó este miércoles la sentencia a morir en la horca para los tres hermanos mexicanos condenados hace dos años por un delito de narcotráfico.
Los tres magistrados de la corte rechazaron la apelación de Luis Alfonso, Simón y José Regino González Villarreal, a quienes solo les queda apelar al Tribunal Federal y, por último, solicitar el perdón real para evitar la pena capital.
"Desgraciadamente, han rechazado la petición, vamos a presentar cuanto antes una apelación ante el Tribunal Federal", dijo en entrevista con la agencia EFE el abogado de los hermanos, Kitson Foong.
Los mexicanos fueron detenidos el 4 de marzo de 2008 en una redada realizada por la policía malasia en la ciudad de Johor, junto a un ciudadano malasio y otro de Singapur, también condenados a muerte.
La defensa no convenció al tribunal de que los hermanos solo se encargaban de las tareas de limpieza y que fueron detenidos en la parte exterior de un almacén, donde los agentes encontraron 29 kilogramos de metanfetamina, valorados en 15 millones de dólares.
El fiscal alegó que se encontraron restos de droga en las ropas y las manos de los acusados.
Según el periodista del diario Milenio Victor Hugo Michel los tres hermanos, originarios del estado de Sinaloa, en el norte de México, salieron cabizbajos de la sala del tribunal de Kuala Lumpur tras escuchar el veredicto.
Una forma de escapar a la pena capital es que la justicia malasia sustituya los cargos de narcotráfico por los de posesión de narcóticos, lo que les conmutaría la pena por una larga estancia en la cárcel y un castigo aplicado con azotes en las nalgas.
El abogado de los hermanos también alega que un tercio de las metanfetaminas desaparecieron mientras eran custodiadas por la policía, lo que debería suponer, en su opinión, la anulación del proceso judicial por una vulneración de los derechos fundamentales de sus clientes.
El gobierno mexicano lamentó "la imposición de la pena de muerte" a los hermanos, "sin prejuzgar la posible culpabilidad o inocencia de los acusados" y con respeto por la legislación de Malasia.
"Como se recordará, México mantiene una posición contraria a la pena de muerte", precisó la Secretaría de Relaciones Exteriores en un comunicado.
Con información de EFE