Los derechos de la expareja de Genaro Góngora fueron violados: CNDH
Ana María Orozco, expareja sentimental del exministro de la Suprema Corte de Justicia Genaro Góngora Pimentel, deberá recibir una disculpa pública por parte del Gobierno del Distrito Federal y los órganos de justicia locales, recomendó este martes la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
En 2011, Orozco demandó a Góngora Pimentel para exigir una pensión alimenticia, pero él la acusó por del delito de fraude genérico por lo que pasó un año en prisión.
En su recomendación, la instancia pidió al gobierno del Distrito Federal y al magistrado Edgar Elías Azar, presidente del Tribunal Superior de Justicia capitalino y del Consejo de la Judicatura del Distrito Federal, que implementen “las acciones necesarias para reparar los daños causados a la mujer y sus dos hijos”.
También solicita al presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal que investigue las omisiones de servidores públicos de este organismo local quienes intervinieron cuando, a petición de Orozco, presa en el penal de Santa Martha Acatitla, señalaron que no existían “suficientes elementos para acreditar la violación a derechos humanos”.
Ante tal conclusión, Orozco solicitó la intervención de la CNDH, organismo que señaló la existencia de violaciones a sus derechos humanos y al debido proceso legal.
Ana María Orozco, expareja sentimental de Genaro Góngora Pimentel, salió en junio del penal de Santa Marta Acatitla , después de que una jueza del Distrito Federal señalara que no había pruebas de ser culpable de fraude.
En su resolución, la juez dijo que no se demostró que haya actuado fraudulentamente al haber registrado a su nombre una casa que Góngora Pimentel, de 77 años, pagó para los dos hijos que tuvo ella, ambos con autismo.
Ella dijo que había registrado a su nombre la propiedad al ser su tutora y que compró la casa con dos millones de pesos que el exfuncionario le entregó. "Él no quiso presentarse ante el notario público para hacer el trámite. Le comenté que pondría el terreno a mi nombre y dijo 'está bien'", contó la mujer a la periodista Carmen Aristegui en mayo.
En esa entrevista también acusó a Góngora de utilizar sus relaciones como magistrado para solicitar un estudio psicológico de ella y confirmar que había maltratado a sus hijos, así como para reducir el monto de la pensión alimenticia de los niños.
La intención del exministro, según Orozco, era quitarle la patria potestad de los menores. En julio, el exministro anunció que retiraba los cargos contra su expareja y le concedía la custodia de sus dos hijos, de acuerdo con un reporte de la agencia Notimex.
El exministro dijo que pese a que un juez le fijó una pensión de 13,000 pesos para la manutención de sus hijos, David y Ulises, él decidió que fueran 50,000, además de que entregó una casa, un automóvil y un seguro médico de gastos mayores, según la agencia gubernamental.