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Peña Nieto da su primer informe acotado por pocos resultados y protestas

El presidente estuvo limitado en espacio para dar su infome, dado en medio de pocas cifras alentadoras y marcado por el descontento social
mar 03 septiembre 2013 06:24 AM

Enrique Peña Nieto dio su mensaje por el Primer Informe de Gobierno acotado por varios frentes.

No pudo hablarle a la nación desde el patio de Palacio Nacional —como lo hizo el expresidente Felipe Calderón varias veces— por la presencia de miles de profesores que acampan en el Zócalo y sus calles aledañas en protesta por la reforma educativa.

El presidente tuvo que dar su mensaje político desde una carpa instalada en la explanada Francisco I. Madero, en la residencia oficial de Los Pinos, y con la mitad de los invitados originales: 800.

No utilizo en esta ocasión foros como el  Auditorio Nacional ni el Campo Militar Marte –cuyos aforos son de 10,000 y 1,500 personas respectivamente -, "con el propósito de que no se siga alterando la vida de la Ciudad de México”, dijo el jueves pasado Eduardo Sánchez, Subsecretario de Normatividad y Medios de la Secretaría de Gobernación.

Las restricciones de espacio no fueron las unicas: los resultados del informe tuvieron "freno" y  las “reformas transformadoras” que harán “despegar” al país, como la energética, con la que ha prometido gas y electricidad baratas, empleos y un crecimiento económico que se note en los bolsillos de los mexicanos ya no dependen de él, sino del Congreso.

“Quitarles el freno” a las reformas financiera, energética y hacendaria será trabajo de los legisladores que tienen en sus manos su discusión y aprobación, dijo el presidente.

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El éxito de estas reformas está limitado también por el descontento de los ciudadanos, que han traducido su rechazo en manifestaciones, como las que desde hace 14 días realizan miembros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) en la Ciudad de México por la aprobación de las leyes secundarias de la reforma educativa.

Este grupo del magisterio ha paralizado las avenidas principales de la capital del país, la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, ha hecho cambiar de sede al Congreso de la Unión, y también movió de fecha y lugar el día del presidente Peña Nieto.

Cuauhtémoc Cárdenas, fundador del Partido de la Revolución Democrática  (PRD), llamó a una manifestación el sábado pasado en contra de la reforma del gobierno federal para abrir el sector petrolero a la inversión privada.

Un informe de números positivos

Peña Nieto inició su mensaje con una felicitación a la Cámara de Diputados por haber aprobado la Ley General del Servicio Profesional Docente.

Además, destacó el crecimiento de 8.1% de visitantes extranjeros al país, la llegada de 23,800 millones de dólares de inversión extranjera directa y el plan nacional de infraestructura que contempla una inversión de 4,000 millones de pesos para el sexenio.

Omitió las cifras a la baja. No dijo en su mensaje que la Secretaría de Hacienda bajó la previsión de crecimiento del país de 3.1% a 1.8%, ni que por ello se dejarán de crear unos 200,000 empleos en lo que resta del año, según estimaciones del secretario de Trabajo y Previsión Social, Alfonso Navarrete Prida, dadas la semana pasada.

No pudo destacar logros económicos porque “el entorno exterior frenó nuestro crecimiento de este año”, pero alertó que “la oportunidad de acelerar nuestra economía está dentro del país, está en las decisiones que tomemos como nación”.

El mandatario pidió a los mexicanos “tener la camiseta bien puesta”, porque nadie, dijo, “conquistará la cumbre por nosotros”. 

Peña Nieto pidió a los mexicanos conocer estas iniciativas, pues “el gobierno de la República es el más interesado en que los mexicanos conozcan las reformas, que las entiendan y sepan los beneficios que les traerán”.

Y aunque destacó la efectividad del Pacto por México y el “ambiente positivo” que ha alentado, uno de sus firmantes, el líder del PRD, Jesús Zambrano, no fue al informe.

Peña Nieto puso como fecha límite para la transformación de México 120 días, en los que se prevé se debatan las reformas en materia fiscal y energética en el Congreso, para que el 2013 sea recordado como "el año en que México se atrevió a despegar", o ganaron las inercias y resistencias.

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