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Peña Nieto lanza su cuarta batalla, ahora en el terreno fiscal

El presidente presenta este domingo la cuarta gran reforma de su gobierno, una controvertida propuesta que implica más impuestos
dom 08 septiembre 2013 07:18 AM

Como en una partida de naipes, el gobierno de Enrique Peña Nieto pondrá sobre la mesa este domingo  su carta marcada con el 'sello fiscal' y con la que busca lograr un póquer de reformas: hacendaria, energética, educativa y de telecomunicaciones.

El presidente entregará esta tarde al Congreso su cuarta propuesta de gran relevancia: la reforma hacendaria, con la que pretende incrementar los ingresos tributarios a las arcas públicas, lo cual implicará mayores impuestos para algunos sectores de la población.

En su búsqueda por que la reforma fiscal sea aprobada, el presidente ya advirtió que pondrá todo su capital político sobre la mesa para que las Cámaras de Diputados y Senadores voten a favor de su iniciativa.

“Todo mi capital, toda mi entrega y todo mi empeño”, dijo Peña en una entrevista con Televisa emitida el viernes pasado, cuando le preguntaron sobre el impulso que dará personalmente a la nueva reforma hacendaria.

Consulta aquí la reforma hacendaria propuesta por Peña Nieto

Desde que llegó al poder en diciembre de 2012, Peña Nieto anunció varias reformas trascendentes para el país. Antes de cumplir un año como inquilino en Los Pinos, el Congreso ya aprobó (con cambios) sus reformas de telecomunicaciones y educación, mientras los legisladores aún estudian las modificaciones propuestas al sector energético para abrirlo más a las empresas privadas.

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La fiscal será la cuarta reforma de importancia y el gobierno de Peña Nieto cuenta con 68 días para convencer a los legisladores de aprobar su plan. Las eventuales modificaciones a los impuestos, la Ley de Ingresos de la Federación y el Presupuesto de Egresos deben estar aprobados a más tardar el 15 de noviembre.

La administración peñista ya adelantó que la propuesta de Presupuesto (el total del gasto público que se ejercerá en 2014) viene bajo dos escenarios: con y sin reforma fiscal. Su argumento en sencillo: si hay más impuestos y cambios tributarios, habrá más dinero para financiar proyectos como becas o programas sociales, pero si las cosas se quedan como están, no habrá presupuesto que alcance.

La tesis puede ser simple, pero está llena de polémica desde hace varios años: los partidos de izquierda han mostrado su rotundo rechazo a gravar los alimentos y medicinas con el Impuesto al Valor Agregado (IVA).

Ese gravamen fue rechazado incluso por el hoy gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) cuando el Partido Acción Nacional (PAN) tuvo la Presidencia entre 2000 y 2012. Apenas el año pasado, el PRI cambió sus estatutos internos para quitar los candados que le impedían apoyar las reformas energética y fiscal en los términos que propone ahora el presidente Peña.

Para que el ‘juego de naipes’ entre el gobierno y la oposición transcurriera con relativa calma, el gobierno y los tres principales partidos políticos, PRI, PAN y el Partido de la Revolución Democrática (PRD), instalaron el Pacto por México, una mesa de diálogo y negociación para impulsar las reformas estructurales.

Todos los partidos apoyaron sin cortapisas las reformas en telecomunicaciones, algunos legisladores del PRD objetaron la reforma educativa pero al final fue aprobada, mientras que la reforma energética hasta ahora mantiene el rechazo del PRD y goza del apoyo del PRI y el PAN.

La reforma hacendaria, que además de aumentos de impuestos puede incluir un nuevo régimen fiscal para dejar de gravar excesivamente a la paraestatal Pemex, pondrá a prueba la convivencia de los partidos y el gobierno en su mesa de negociación.

El PRI no cuenta con los votos suficientes para aprobar la reforma fiscal en ninguna de las dos Cámaras, pero el apoyo del PAN le sería suficiente para que los cambios surtieran efecto.

En el caso de las reformas constitucionales, como la energética (que busca cambios a la Carta Magna) el PRI debe buscar los votos de PAN y del PRD, pues estas reformas deben ser ratificadas por al menos dos tercios en las Cámaras.

Las controversias

El paquete económico y la iniciativa de reforma fiscal que presente Peña Nieto al Congreso implicarán algunos cambios que en el pasado ya han encendido los ánimos de partidos de oposición, académicos y sectores laborales y empresariales.

Según un informe de la agencia Reuters, el gobierno pretende ampliar la tasa del 16% de IVA a productos que hoy están exentos , como alimentos y medicinas, aunque la propuesta prevé dejar libre del gravamen una canasta básica que incluye tortilla, frijol y leche.

La propuesta además incluiría elevar la tasa máxima del Impuesto Sobre la Renta (ISR) a las personas físicas y empresas desde el 30% actual hasta alrededor de 37% para los que más ganan.

Este domingo, un reporte acutalizado de Reuters indicó que la propuesta presidencial dejaría fuera la extensión del IVA a alimentos y medicinas , y la tasa del ISR se elevaría solo hasta el 32%.

La iniciativa también contemplaría regularizar los cobros para los pequeños contribuyentes, inhibir la economía informal, gravar las ganancias en la Bolsa Mexicana de Valores y suprimir varios regímenes fiscales especiales que permiten a algunas empresas pagar menos impuestos mediante subsidios o pagos diferidos.

El gobierno pretende elevar la baja recaudación tributaria del país, que actualmente tiene un nivel cercano al 10% del PIB, pero sin afectar la magra economía del 45.2% de la población que ya se encuentra en pobreza (53.3 millones de personas).

El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, adelantó el mes pasado que la propuesta tendrá el enfoque de fortalecer las finanzas públicas para financiar los programas que beneficien a la población más vulnerable.

El gobierno pondrá al descubierto sus cartas para intentar convencer a los legisladores de votar a favor de su iniciativa fiscal. La tarde de este domingo presentará los documentos ante el Congreso, y se prevé que a las 18:00 horas, el presidente Peña Nieto y el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, hagan una justificación y defensa de su propuesta en un evento público transmitido a todo el país desde Los Pinos.

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