Padres de familia reabren escuelas ante la parálisis educativa en Oaxaca
A más de seis semanas de paro educativo en Oaxaca, padres de familia han asumido las actividades docentes en escuelas del estado, en sustitución de los profesores de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) que protestan contra la reforma educativa en la Ciudad de México.
“Sí hay un número que rebasa ya las 100 escuelas en donde son los padres de familia y las autoridades (municipales) los que tomaron la decisión de abrirlas”, dijo en entrevista Joaquín Echeverría, secretario general de la Sección 59 del SNTE (Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación), una facción sindical que no apoyó la protesta masiva en la capital mexicana.
Según Echeverría, entre 200 y 300 padres de familia y funcionarios han pedido asesoría al grupo que representa para consultar procesos pedagógicos y conocer sobre programas educativos.
“Lo que hacemos es ayudarles con la asesoría mínima que ellos requieren, principalmente en las gestiones y la situación de los libros de texto”, dijo.
El líder sindical descartó “categóricamente” que profesores de la Sección 59 impartan las clases, debido a que no tienen plazas suficientes para cubrir la demanda. La Sección cuenta con poco más de 2,500 plazas docentes, lo que representa alrededor de un 2% de los profesores en el estado, según cifras oficiales.
La Sección 59 del SNTE es un grupo antagónico a la Sección 22 de la CNTE. Esta última facción acusa a la Sección 59 de poner al gremio al servicio del gobierno.
Para reabrir las escuelas, los padres de familia y autoridades sindicales recurren a profesionistas de sus respectivas localidades, detalló Echeverría.
Las escuelas reabiertas se concentran principalmente en las regiones de Valles Centrales —donde se ubica la capital—, Tuxtepec y la Cañada (en el norte), seguidos de la Mixteca, La Costa y el Istmo.
El vocero del gobierno estatal, Miguel Ángel Muñoz, indicó que la administración no posee una cifra oficial de las escuelas que han reabierto, salvo 85 a cargo de profesores de la Sección 59.
“Sí hay en algunos municipios padres de familia que han abierto las escuelas y que están dando clases; padres, no maestros”, dijo Muñoz.
No obstante, el vocero aseguró que estas actividades “no responden a un programa”. “Puede haber una actividad no necesariamente académica, porque no tienen un plan de estudios, una formación pedagógica, programas o estrategia didáctica”, dijo.
Muñoz estimó que las reaperturas se concentrarían en escuelas completas —donde un solo profesor da clase a todos los grados— ubicadas en zonas remotas con plantas docentes pequeñas.
Uno de estos casos ocurre en Putla, un municipio con población indígena ubicado en la región de La Costa, donde por iniciativa de la comunidad alumnos de varias comunidades fueron recibidos en una escuela que permanece abierta en Miguel Hidalgo Chicahuaxtla, indicó la regidora municipal de Educación Leticia Hernández.
En Santa Cruz Xoxocotlán, municipio del centro del estado, un grupo de padres de familia también impulsó la apertura de un escuela primaria asesorados por la Sección 59.
Ambos casos fueron rechazados por la Sección 22 en asambleas recientes, al igual que otros en los que se reiniciaron las clases.
Pero la intervención comunal ante la parálisis educativa en Oaxaca no es algo nuevo. En agosto pasado, la población de Mitla —aledaña a la capital— puso un ultimátum a los profesores para que no hubiera más paros ni bloqueos y trabajarán de acuerdo al calendario.
El paro educativo en Oaxaca fue iniciado el 19 de agosto pasado —desde que inició el ciclo escolar 2013-2014— por la Sección 22 de la CNTE, cuyos integrantes atienden clases en 98% de las 13,000 escuelas en el estado y a una plantilla de un millón 300,000 alumnos de nivel básico.
La Sección 22 y otros grupos magisteriales de estados como Michoacán protestan desde el 19 de agosto en la Ciudad de México contra la reforma educativa que entró en vigor a mediados de septiembre. La reforma sienta nuevas bases para la evaluación de profesores y devuelve al Estado la facultad de asignar plazas, pero los inconformes la consideran “punitiva” para el sector docente y violatoria de derechos laborales.
El gobierno de Oaxaca, al igual que los de Michoacán y Guerrero, descartó el sábado pasado despedir a los profesores inconformes por no existir condiciones. Tres días antes, el secretario de Educación destacó como una “obligación” de los estados aplicar las sanciones contempladas en la reforma educativa.
El gobierno de Oaxaca hasta el momento solo ha retenido los salarios de los inconformes hasta que regresen a las aulas.
En tanto, la Sección 22 determinó el sábado pasado en una asamblea interna que continuará sus protestas masivas en la capital del país. Esto incluye una marcha a la Plaza de las Tres Culturas en Tlatelolco el próximo 2 de octubre, un encuentro nacional el 5 de octubre y otra marcha contra la reforma energética el 12 de octubre.