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La adversidad y la fama no desvían a Paloma Noyola para alcanzar su sueño

La niña 'genio' de Matamoros sueña con seguir el ejemplo del maestro que la inspiró para superar las condiciones adversas en las que creció
jue 24 octubre 2013 09:15 AM

"He tenido una infancia difícil", cuenta Paloma Noyola Bueno, quien este miércoles cumplió 12 años en medio de una avalancha mediática tras aparecer en la portada de una revista estadounidense. Pero los reflectores no le quitan su sueño de convertirse en maestra de matemáticas a pesar de vivir junto a un basurero, en una de las zonas más marginadas de Matamoros, Tamaulipas.

Su padre no pudo atestiguar sus logros. Murió víctima de cáncer de pulmón tras pasar sus últimos años trabajando como pepenador. El dolor por la pérdida no impidió que Paloma obtuviera el primer lugar en la Evaluación Nacional de Logros Académicos en Centros Escolares (Enlace), realizada por la Secretaría de Educación Pública (SEP), al conseguir 921 puntos.

Una proeza que logró "concentrándose en la clase… si se quiere se puede", sostiene en entrevista con CNNMéxico.

La joven afirma que su vida cambió desde hace un año, cuando se conoció en medios locales que Paloma era la alumna más destacada de matemáticas. Algo que no hubiera sido posible, afirma, si su maestro no hubiera cambiado el método de estudio.

"El maestro quería que todos participaran, era como un juego", relata.

Su maestro, Sergio Juárez, buscó que los alumnos interactuaran entre ellos para resolver problemas complejos y así despertar su potencial, algo que logró en menos de un año, convirtiendo una escuela pobre en un semillero de “niños genio”. Su método logró que 10 niños de su clase, entre ellos Paloma, consiguieran más de 900 puntos en el examen de matemáticas.

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Quería "que todos (los alumnos) descubrieran qué querían aprender y a mi me gustaban las matemáticas", dice la joven, quien fue calificada como "la próxima Steve Jobs" por la revista tecnológica Wired.

Esto no fue fácil, sostiene, debido a las carencias con las que vive. Desde que murió su padre, el único sostén económico de su familia ha sido una hermana mayor. Su casa está ubicada cerca del relleno sanitario de la ciudad de Matamoros, en una zona que no cuenta con línea telefónica fija, agua corriente, drenaje o calles pavimentadas. 

Para llegar a la escuela primaria José Urbina López, Paloma tenía que caminar todos los días junto a un canal de aguas negras. Las cosas se dificultaban si llovía, ya que calles se convertían en lodazales.

Sin embargo, su vida dio un giro a raíz de sus sorprendentes logros en matemáticas.

A las numerosas entrevistas en medios de comunicación, siguieron las promesas de funcionarios de gobierno, muchas de las cuales no se cumplieron. El gobierno estatal la becó con 400 pesos mensuales, pero ese apoyo dejó de recibirlo cuatro meses después de haber iniciado el sexto grado.

La joven, sin apoyo oficial, entonces se enfrentó a la dificultad de seguir con sus estudios de secundaria y llegar a cumplir su sueño: ser maestra de matemáticas.

Pero "el respiro llegó", afirma su madre, Guadalupe Bueno, luego de que a través de Fondeadora, una plataforma mexicana de crowdfunding utilizada para financiar diversos proyectos, su hija recibió el apoyo de la fundación Legorreta Hernández, que se propuso a recaudar al menos 100,000 pesos y aportar un peso por cada peso donado.

De dicha forma se logró recaudar un total 214,892 pesos, la mitad aportada por donaciones de la sociedad civil, recurso que es entregado en mensualidades a la familia de la joven estudiante. Hasta ahora es el único apoyo que recibe.

"Es de esta forma que ella se apoya, se puede mover, tiene para sus gastos, sus estudios”, dice su madre, quien afirma está "contenta y orgullosa" de su hija. Está "bien feliz" por todos los reconocimientos, comenta la madre.

Paloma dice que tiene una invitación abierta por parte de la revista, para viajar a Estados Unidos y hablar sobre su experiencia. Sin embargo, pide que no se olvide a sus nueve compañeros que también sacaron puntuaciones elevadas en la prueba Enlace. "A cuatro les entregaron laptops pero de los otros ya no he sabido", afirma.

La joven ahora cursa el primer grado en la Escuela Secundaria Técnica 4 "General Lázaro Cárdenas", en Matamoros, que este miércoles, le festejó su cumpleaños.

Con el festejo también llegaron los medios y las entrevistas —que se han multiplicado a raíz de que saliera en la portada de Wired—, algo que empieza a cansarla. "Se siente un poco incómoda", dice su madre.

Guadalupe Bueno afirma que su hija solo quiere estudiar y prepararse. Paloma participará el 28 y 29 de octubre en el quinto Concurso Nacional de Cálculo Mental, convocado por el Tecnológico de Monterrey en la Ciudad de México.

A pesar de la atención mediática que Paloma ha recibido en las últimas semanas, ella sigue siendo la misma. Su sueño de algún día poder enseñar matemáticas, como el maestro que la inspiró, aún permanece intacto.

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