López Obrador vuelve con gira contra la reforma energética tras su infarto
El excandidato presidencial de izquierda Andrés Manuel López Obrador encabezó su primer acto público tras haber sufrido un infarto en diciembre pasado, y anunció que este martes inicia una gira nacional en Nayarit en contra de la reforma energética.
Su primer mensaje fue en contra de la reforma, que abre la industria eléctrica, del petróleo y demás hidrocarburos a capital privado.
“Es obvio que se intensificará la corrupción, con más énfasis en el sector energético. Se pelearán como buitres los contratos de perforación de pozos de hidrocarburos. La hacienda pública obtendrá menos ingresos por el saqueo y el reparto de utilidades del petróleo con magnates del extranjero”, dijo el líder de izquierda
López Obrador comparó la reforma con el porfiriato y dijo que “no se requiere ser profeta para advertir lo que sucederá luego de consumado el plan privatizador, disfrazado de “reformas estructurales”, incluido lo más reciente, la entrega del petróleo y de la industria eléctrica”,
El político agregó que denunciarán a Enrique Peña Nieto ante instancias internacionales por traición a la patria, pues fue él quien propuso la reforma energética, la cual fue aprobada en menos de 15 días por el Congreso y promulgada para su entrada en vigor.
Visiblemente más delgado, López Obrador aseguró que está bien de salud y que se encuentra en " franca recuperación , bien y de buenas".
"Estamos muy bien, y vamos mañana a iniciar una gira por todo el país (...) vamos a recorrer todas las regiones de México para que no se apague la llama de la esperanza", dijo el excandidato presidencial en entrevista, tras su discurso para abrir la reunión del Consejo Nacional del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) , grupo político creado por él que busca ser partido.
El 1 de diciembre encabezó un mitin en el Zócalo capitalino, en el que anunció que se instalarían cercos alrededor del Congreso para frenar la reforma, pues considera que ateta contra la soberanía nacional.
El líder de Morena dijo este lunes que "los bienes de la nación se han entregado a extranjeros", en referencia a la reforma constitucional aprobada por el Congreso y los estados en diciembre.
"Hemos regresado a los tiempos del porfiriato –dictadura de fines del siglo 19-, como si se hubieran diluido los logros de la revolución", dijo López Obrador, quien luce más delgado que en el mitin de diciembre pasado .
Además, llamó a los militantes de Morena a "derrocar al PRIAN", la presunta alianza entre el oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el opositor Partido Acción Nacional (PAN), para abolir las "reformas estructurales, revertir las privatizaciones y recuperar los recursos y los bienes de la nación".
"Hagámoslo sin violencia, despertando y organizando al pueblo, con una revolución de las conciencias, democrática, impulsada por el pueblo para limpiar de corrupción a México", dijo el tabasqueño.
Después de Nayarit, en el occidente del país, López Obrador visitará Sonora; el sábado estará en Coahuila, el domingo en Nuevo León (noreste) y el lunes en Baja California Sur (noroeste), dijo César Yáñez, su jefe de prensa.
Morena, igual que otras fuerzas de izquierda, entre ellas el Partido de la Revolución Democrática (PRD) –al que pertenecía López Obrador– se oponen a la reforma energética de Peña Nieto.
Más cerca de ser partido
El presidente de Morena, Martí Batres, quien habló después de López Obrador, dijo que el movimiento ya duplica el número de afiliados (con 500,000) necesarios para obtener el registro y participar en las elecciones de 2015.
Al dar un balance del trabajo de Morena, Batres dijo que sus dirigentes no tendrán un salario aún cuando sean un partido político y que las candidaturas se darán a personalidades externas que reflejen la diversidad del país.
Convertirse en partido, dijo, no es una cuestión burocrática, sino que tiene "trascendentes implicaciones políticas" pues con Morena el pueblo tendrá un "instrumento de lucha y transformación del país".
Batres dijo que las siguientes tareas de Morena serán consolidar la estructura organizativa, crear los comités de base por colonia y pueblo, y convertir al movimiento en la fuerza opositora del país.