La inseguridad, ¿una 'piedra' en el viaje de Peña Nieto a Davos?
Durante su primer día en Davos, Enrique Peña Nieto ofreció una conferencia magistral en la que destacó las reformas alcanzadas en 2013, un panorama que el presidente del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), Klaus Schwab, describió como “buenas noticias” para México.
No obstante, el escenario exitoso que presentó el mandatario mexicano tuvo que enfrentar cuestionamientos en materia de seguridad.
Dos de las cuatro preguntas hechas por Schwab este jueves estuvieron enfocadas al tema de la inseguridad, y una de ellas, a la situación específica en Michoacán y el despliegue de fuerzas federales que Peña Nieto ordenó recientemente.
La lectura de este hecho, para algunos analistas, es un reflejo de que la seguridad seguirá siendo un asunto importante en foros internacionales, complicando la tarea de promocionar la imagen del país, un objetivo que los mandatarios tradicionalmente persiguen en encuentros como el WEF.
“Este tipo de foros son para vender el país, para venderle a los posibles inversionistas una buena imagen del país”, dijo Alberto Aziz Nassif, académico del Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS).
“(Sin embargo), ya no es tan sencillo decir que con una buena campaña de mercadotecnia se puede convencer de que la situación va mejorando, cuando en realidad muchos indicadores y organizaciones afirman lo contrario”.
Peña Nieto llegó esta semana a Davos, Suiza, con poco más de un año en el cargo.
En ese periodo, ha insistido en que el crecimiento económico será la prioridad de su mandato (2012-2018) y en que, en materia de seguridad, se han alcanzado logros reales. Según cifras oficiales, los homicidios dolosos disminuyeron 30% en un año, pero la incidencia de secuestros y extorsiones aumentó.
Desde mediados de este mes, además, el gobierno de Peña Nieto desplegó una nueva estrategia de seguridad en Michoacán, un estado del suroeste mexicano donde el anterior presidente, Felipe Calderón, comenzó en 2006 su ofensiva contra los grupos del crimen organizado.
Para Gustavo López Montiel, académico del Tecnológico de Monterrey (ITESM), la situación que se vive en Michoacán es uno de los factores que más influyen en la percepción que otros países tienen de México.
“Una de las percepciones que se quedan es que el gobierno mexicano no ha sido capaz de modificar las condiciones de seguridad que dejó el gobierno de Calderón, y no únicamente eso, sino que se han agravado en algunas regiones del país. Se puede generar la perspectiva de que está fuera de control”, dijo.
Cuestionado al respecto por Schwab, Peña Nieto afirmó este jueves que el Estado “ha reaccionado” y está actuando para controlar el crecimiento de los grupos de autodefensa y frenar a las organizaciones delictivas.
“El gobierno federal ha entrado de lleno a los municipios del estado de Michoacán en donde hay debilidad institucional, donde los cuerpos de seguridad pública municipales estaban debilitados o algunos cooptados por el crimen organizado. (…) Esto es lo que estamos haciendo en Michoacán y es parte de la estrategia focalizada, dedicada precisamente a asegurar condiciones de tranquilidad y de paz para todos los mexicanos”, dijo.
Nicolás Loza, académico de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), consideró que el tema de la seguridad obligará a Peña Nieto y a su equipo a realizar un “ajuste sobre la marcha” en su estrategia de comunicación para el foro de Davos.
Para Loza, sin embargo, los ajustes no necesariamente serán negativos, sino que el gobierno de México puede aprovecharlos para explicar ante líderes mundiales qué ocurre en la nación.
“El hecho de que sean cuestionados al respecto paradójicamente les da la oportunidad a la que habían renunciado de aclarar la situación, que es conocida a nivel mundial. Permite que se aclaren las dimensiones del problema. (...) La información en sí misma es mejor antídoto para evitar una mala imagen del país que ocultar esa información”, dijo.
Para López Montiel, por el contrario, que los funcionarios se refieran a la seguridad en México implica más riesgos que posibles beneficios.
“Los inversionistas se mueven con rumores. Entonces, el tema no es lo que el presidente les dice que está haciendo para acabar con la inseguridad. El tema es que la inseguridad está ahí, sigue ahí. (…) La palabra inseguridad genera por lo menos dudas”, dijo.
Javier Oliva, académico de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), coincidió con ese punto de vista.
“El tema de la seguridad sí afecta las condiciones de inversión nacional y extranjera. (…) Bajo ninguna circunstancia, el miedo, el terror que tienen acosados a miles de mexicanos en Michoacán es buena noticia para nadie y menos para las estructuras de gobierno”, dijo.
Peña Nieto prevé reunirse este viernes con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, asistir a un encuentro con representantes de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y dar un mensaje a medios, antes de iniciar el viaje de regreso a territorio mexicano.
Para Oliva, es indispensable que para esas reuniones el equipo del mandatario esté listo para enfrentar más cuestionamientos sobre la seguridad en México.
“Es evidente que el tema de Michoacán tiene un tratamiento a nivel mundial. Y sí es importante que el gobierno de la República prepare las respuestas, se adelante a las respuestas de lo que pueda suscitarse en ese mismo tema”, dijo.