La cifra de secuestros no denunciados es "enorme", reconoce el gobierno
Mientras el número de denuncias por secuestro se mantiene al alza, el gobierno de México reconoció que la cifra de casos no denunciados es "enorme" y que las autoridades deben redoblar esfuerzos para detener este delito.
"Hay una enorme cifra negra en esta materia y hay que reconocerlo", dijo este miércoles el coordinador nacional contra el secuestro, Renato Sales, en su primer mensaje a medios desde que fue nombrado en el cargo el pasado 28 de enero.
La declaración del funcionario coincide con los señalamientos de algunas organizaciones civiles y se produce pocos días después del más reciente reporte del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) con los índices de los delitos de alto impacto.
Con relación al secuestro, el informe del SNSP señala que su incidencia en enero y febrero de este año creció en 11.2% respecto de los mismos meses de 2013 . Agrega que en ese periodo hubo 278 denuncias, lo que representa un promedio de cinco casos al día.
Sales fue nombrado coordinador de la Estrategia Nacional Antisecuestro , con la que el gobierno de Enrique Peña Nieto busca frenar este delito. Sales dijo que el trabajo de las autoridades se mantendrá hasta que haya una disminución "sensible" en los índices.
Ante la prensa, el funcionario señaló que una de las primeras acciones de la Coordinación Nacional Antisecuestro (Conase) ha sido trabajar con los gobiernos de 15 estados para ubicar acciones efectivas contra el secuestro.
Citó como ejemplo el caso de Chihuahua, donde los secuestradores sentenciados fueron ubicados en un solo penal —lo que evita que "contaminen" a otros reos, según Sales—, así como el del Estado de México, donde se está capacitando a jueces especializados en la materia.
"Para nosotros, lo más importante es liberar a las víctimas, detener a los secuestradores y sentenciarlos con apego a la ley", dijo.
En 2013, México registró 1,702 denuncias por secuestro, un aumento del 20% con relación a 2012. Según los reportes del SNSP, algunas de las entidades con mayor incidencia de este delito son Guerrero, Estado de México, Michoacán y Tamaulipas.