12 horas en un autobús: un viaje sobre granizo del DF a Toluca
Viajar en autobús desde la zona de Santa Fe, en el poniente del Distrito Federal, hacia Toluca, la capital del Estado de México, usualmente toma una hora. Pero este miércoles, la historia fue distinta por una granizada que dejó al menos 13 centímetros de hielo sobre la autopista: algunas personas tardaron más de 12 horas en el trayecto.
Los pasajeros del autobús 901 de la línea Caminante salieron desde la Ciudad de México a las 18:20 horas del miércoles y llegaron a Toluca a las 06:40 del jueves.
Durante los primeros minutos del viaje, los pasajeros creían que el camión no se movía por el tráfico, algo común en las salidas de la capital mexicana, en especial en periodos vacacionales como el de esta Semana Santa.
Al cabo de la primera hora, cuando el vehículo no había avanzado ni dos kilómetros, las personas empezaron a avisar a sus conocidos que llegarían tarde, mientras que otros les advertían no “intentar” tomar la carretera.
“No he llegado ni a la caseta”, decían varios mientras hablaban por teléfono, en referencia al único peaje que hay por esta vía.
Algunos recurrían a las redes sociales para informarse. “Dice un amigo que la fila ya llega hasta Santa Fe”, comentó un pasajero cuando ya iban en la autopista.
“Dicen que se van a tardar como cinco horas en limpiar la carretera, ¡qué horrible!”, agregó otra.
“Mi mamá seguro cree que me fui de borracho. Ojalá y esa fuera la razón, ya le dije que cheque Twitter o Facebook”, dijo un veinteañero. Después le llamó para decirle que todo estaba “tranquilo”.
Cuando los celulares se empezaron a quedar sin batería, algunos pasajeros le pedían el cargador al conductor. “Aunque sea para avisar cuando llegue”, comentó uno; otros pretendían pedir una llamada.
Cuatro películas
Normalmente, el viaje del DF a Toluca ‘alcanza’ para ver solo una parte de una película. Sin embargo, los viajeros de este autobús pudieron ver cuatro.
“Sabes, mi mamá lleva meses tratando de que vea esta película de Denzel Washington, y mira lo que tuvo que pasar para que la viera, ¡y me gustó!”, dijo uno en referencia a El Vuelo.
“De por sí no me gusta la versión de Keira Knightley, y ahora tengo que ver esta que es mucho más vieja”, comentó otro de los pasajeros, cuando inició Orgullo y Prejuicio.
Tras las ocho horas de filmes, el ánimo entre los viajeros cambió: “seguro llegaremos en la madrugada, si bien nos va”, sentenció uno.
“Al paso que vamos, seguro llegaré y solo me va a dar tiempo para cambiarme y regresarme al trabajo”, comentó otra persona que estaba sentada en medio del camión.
Luego, el chofer apagó las televisiones y los pasajeros empezaron a quedarse dormidos.
Al día siguiente, a las 06:10 horas, las luces del camión se encendieron y Toluca se veía “cerca”.
“Ya mejor voy a tomar un camión en lugar de un taxi a mi casa, es tan tarde que ya hasta el transporte público está trabajando”, comentó una de las pasajeras.