El aborto genera más muertes que la "guerra contra el narco": Iglesia
La ley que despenaliza la interrupción del embarazo en el Distrito Federal ha causado más muertes que la “guerra contra el narcotráfico” en todo el país, dijo este fin de semana la Iglesia católica en un pronunciamiento en contra de esta política pública en la capital y de una propuesta para legalizarlo en Guerrero.
La Iglesia menciona en un editorial de su semanario Desde la fe que “más de 120,000 niños y niñas” han sido privados de la vida desde 2007 con la ley que permite la interrupción de un embarazo antes de las 12 semanas de gestación en la Ciudad de México.
Ello debido a que considera que “científicamente se ha demostrado que la vida humana empieza desde el momento de la concepción”.
“Hay quienes en la actualidad se niegan a aceptar esta evidente realidad, ya sea por intereses económicos, pagos de facturas políticas y partidistas, o por el falso alegato de que se trata de legislar 'en beneficio de la mujer'”, añade.
En la capital mexicana, desde 2007 está permitido que las mujeres puedan optar por interrumpir su embarazo. Hasta abril pasado, casi 120,000 mujeres han solicitado la interrupción legal del embarazo, y 32,000 de ellas provienen de otras entidades del país, informó la Secretaría de Salud capitalina.
En febrero de ese año, el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, dijo que en el sexenio anterior (2006-2012) hubo alrededor de 70,000 muertes relacionadas con la violencia que genera la delincuencia organizada, aunque a finales de la administración pasada se dejaron de contabilizar los casos.
La Iglesia católica criticó a los gobiernos del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el partido de izquierda más grande del país, que han abierto el debate sobre el aborto en Guerrero, pues considera que es sólo una "cortina de humo" ante otras problemáticas en la entidad.
También un grupo de obispos mexicanos tuvo una reunión este fin de semana con el papa Francisco ante quien plantearon que en México hay una “política de agenda” entre los gobernantes de la izquierda para imponer la "cultura de la muerte" como el aborto, según un comunicado del Consejo del Episcopado Mexicano.
“Autoridades sordas”
Al igual que el Distrito Federal, el PRD gobierna el estado de Guerrero, donde el este mes fue presentada una iniciativa del gobernador Ángel Aguirre Rivero para despenalizar el aborto bajo ciertos requisitos, como que se realice antes de las 12 semanas de gestación.
Y aunque los legisladores del PRD y otros partidos de izquierda tendrían los votos suficientes para aprobar la ley en el Congreso local, su discusión quedó suspendida el viernes , pues los diputados desean obtener “mayor información” antes de someterla a la consideración en el pleno.
La Iglesia católica dijo que la iniciativa presentada por el gobernador Aguirre se trata de una “legislación inaudita” que pretende extender la “dictadura de la muerte” en este estado.
“En un escrutinio riguroso, el proyecto legislativo del Ejecutivo local es una cortina de humo, un ardid y distractor cargado de los clichés y mañas populistas encubridoras del gobierno que olvidó a sus mujeres, de la realidad del estado castigado, hambriento, empobrecido y depredado por los responsables del bien común, ejemplo perfecto para tapar la incapacidad y fracaso de la agonizante administración estatal”, señaló la Iglesia en Desde la fe.
"Son estados regidos por autoridades sordas y huecas de racionalidad, dogmáticas y empeñadas en robar la esperanza cuando se mata a los seres humanos por el aborto”, agregó.
En todo el país, 18 de 32 entidades han aprobado reformas que protegen la vida desde la concepción o la fecundidad. Varios estados permiten el aborto cuando una mujer fue víctima de violación, pero en otros como Hidalgo, Guanajuato o Baja California Sur, la interrupción del embarazo se castiga con cárcel.
Queja ante el Papa
Un grupo de obispos mexicanos, encabezados por el cardenal José Francisco Robles, presidente del CEM, celebró una reunión en el Vaticano con el papa Francisco este fin de semana, en la que el tema del aborto estuvo presente.
“Tenemos que lamentar como se ha ido enseñoreando la cultura de la muerte, manifestada en una falta de respeto a la sacralidad de la misma vida; no sólo en las muertes violentas y crueles del crimen organizado, sino también en la mentalidad abortista de algunos sectores”, dijo Robles durante el encuentro.
Por su parte, el papa recordó que México es un país con valores cristianos que hay que reforzar ante las “múltiples violencias que afligen a la sociedad mexicana”.
Francisco dijo que a los sacerdotes "no les compete aportar soluciones técnicas o adoptar medidas políticas", sino anunciar a todos la buena noticia de que "Dios, en su misericordia, se ha hecho hombre para salvarnos", según el comunicado del CEM.