'Corderistas' acusan a Gustavo Madero de excluirlos de cargos en el PAN
Cuando se reeligió como dirigente del opositor Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero afirmó que incluiría en los órganos de decisión a todos los grupos dentro del panismo, pero para los militantes cercanos a Ernesto Cordero, su rival en la contienda interna, esa promesa no se está cumpliendo como ellos quisieran.
Panistas afines a Cordero criticaron este lunes cómo quedó integrada la Comisión Permanente del PAN , el órgano colegiado que en sus funciones incluye revisar las decisiones de la dirigencia, aprobar la política de alianzas electorales y descalificar declaraciones o iniciativas de su militancia.
Para los 40 asientos en la Comisión Permanente, Madero sólo propuso a dos militantes cercanas a Cordero, lo que en opinión de este grupo es "incongruente" con su mensaje de inclusión.
"Se habla de inclusión y no hay inclusión, se habla de generosidad y no la hay, se habla de combate a la corrupción y no lo hacemos al interior. El discurso no necesariamente está siendo un discurso congruente", dijo la senadora Adriana Dávila, quien fue parte del equipo de Cordero en los comicios internos.
La legisladora fue una de las panistas afines a Cordero elegidas para la Comisión Permanente del PAN; la otra fue la también senadora Rosa Adriana Díaz Lizama, una de las principales integrantes de su planilla.
En entrevista, Dávila consideró que el número de asientos para su grupo debió haber sido mayor, en proporción al porcentaje de votos que Cordero obtuvo en la elección interna del pasado 18 de mayo: 43%, contra 57% de Madero.
La senadora Pilar Ortega, quien fungió como representante de Cordero ante la comisión organizadora de la competencia, coincidió con ese punto de vista.
"Creo que hay una parte muy importante que se vio reflejada en las urnas, donde estamos hablando de más de 43% de panistas pidiendo un cambio dentro de la dirigencia del partido, y ese sector de panistas no está debidamente representado", dijo en entrevista.
De los otros 38 miembros de la Comisión Permanente del PAN, la mayoría son estrechos colaboradores de Madero, como la senadora Laura Rojas, el exsenador Marko Cortés y el diputado local Federico Döring, que formaron parte de su equipo de campaña.
"Yo sí veo con pena el que se haya dado esta exclusión. Espero, espero que pueda haber canales de diálogo, de comunicación", dijo a medios la senadora Mariana Gómez del Campo, también afín a Cordero.
Por otro lado, el diputado federal Juan Pablo Adame, promotor de Madero en el estado de Morelos, señaló que la inclusión es "necesaria" para fortalecer al PAN y consideró que ésta puede producirse en el reparto de otras posiciones dentro del partido, como los puestos en el Comité Ejecutivo Nacional (CEN).
"Yo tengo la esperanza de que en los espacios que aún quedan sin definir, muchos de ellos pueden ser en el propio CEN, se pueda dar esta inclusión hacia las distintas expresiones en su justa medida, para que todos nos sintamos parte de esto", dijo en entrevista.
Dávila y Ortega señalaron que, para no afectar al panismo, el grupo cercano a Cordero evitará entrar en una confrontación constante con el de Madero, como la que sostuvieron durante la contienda interna.
Sin embargo, advirtieron que ese reparto de posiciones es una "mala noticia" para la unidad del PAN.
"No nos queda otra que intentar mecanismos que nos puedan dar espacios a nosotros para plantear una visión distinta a la que la dirigencia nacional tiene de qué queremos para el partido", dijo Dávila.
"Esto no nos gusta. Sin embargo, considero que es tiempo ya de dar vuelta a la página, confiar en que esta Comisión Permanente y que el propio dirigente de Acción Nacional en los hechos sí escuchen las voces de todos los panistas", comentó Ortega.
El grupo de Madero, al frente del PAN desde diciembre de 2010, y el de Cordero, próximo al expresidente Felipe Calderón (2006-2012) , han tenido varios enfrentamientos públicos desde que el partido perdió la Presidencia de la República hace dos años.
Uno de los temas que ha causado más tensiones es la relación del PAN con el presidente Enrique Peña Nieto y el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).
El inicio de la segunda gestión de Madero y la integración de la Comisión Permanente del PAN se producen un año antes de las elecciones de 2015, en la que los panistas buscarán ganar posiciones tanto en la Cámara de Diputados como en las 17 entidades que tendrán comicios locales, nueve de ellas en las que se elegirá gobernador.