Autoridades detienen al "objetivo prioritario" del plan para Tamaulipas
Tres líderes del crimen organizado en Tamaulipas, incluyendo el objetivo "prioritario" de la nueva estrategia de seguridad implementada por el gobierno federal en esa entidad, fueron detenidos entre el domingo y el martes pasados.
Hasta ahora han sido aprehendidos seis de los 12 objetivos principales que se fijó el gobierno federal desde el 13 de mayo pasado, cuando se presentó el nuevo plan de seguridad para Tamaulipas, informó este miércoles Monte Alejandro Rubido García, titular de la Comisión Nacional de Seguridad (CNS).
Rubido dijo a medios que la primera detención fue la de Juan Manuel Rodríguez Rodríguez, aprehendido en Reynosa el martes por elementos federales, sin realizar disparos.
El presunto delincuente es acusado de homicidio, secuestro, extorsión, trasiego de drogas, portación de armas para uso exclusivo de las fuerzas armadas, además de ser el promotor de la violencia registrada en la entidad fronteriza, durante los últimos meses.
"Era considerado el objetivo prioritario dentro de la nueva fase de seguridad del gobierno federal, al ser el delincuente de mayor rango dentro de uno de los dos grupos delictivos en Tamaulipas", mencionó Rubido García.
Según el funcionario, tras una ola de violencia en 2010 por la pugna entre los dos grupos antagónicos del crimen organizado en el territorio tamaulipeco (Los Zetas y el cártel del Golfo) Mario Armando Ramírez Treviño, El Pelón o X-20 , asumió el control del Cártel del Golfo, pero tras su detención en agosto de 2013, Juan Manuel Rodríguez Rodríguez logró subir en el mando del grupo delictivo.
"El hombre no fue aceptado por las diferentes facciones del grupo delincuencial, lo que generó el aumento de violencia. El individuo ordenaba las muertes de integrantes de otras organizaciones y de su propia organización, distribuía dinero y armas, en los estados de Tamaulipas y Nuevo León y controlaba el trasiego de droga".
Según el gobierno federal, Rodríguez Rodríguez era apoyado por su hijo Juan Manuel Rodríguez García, quien fue detenido el 25 de mayo en Nuevo León.
La Comisión Nacional de Seguridad destacó que Juan Manuel Rodríguez Rodríguez acudía periódicamente a un tratamiento médico en una clínica de Reynosa, por lo que se activó a un grupo de fuerzas federales, que lo ubicaron a bordo de un vehículo acompañado de su escolta personal, Luis Ángel Montero.
Las fuerzas federales procedieron a la detención del sujeto sin un solo disparo.
La segunda detención anunciada por el gobierno federal fue la de Juan Pablo Leal Gutiérrez, de 34 años, primo de Jesús Leal Flores, uno de los principales aliados de Mario Armando Ramírez Treviño.
Leal Gutiérrez está relacionado con tres averiguaciones previas por distintos delitos del orden federal.
Finalmente, elementos de la Marina y personal del Ejército mexicano llevaron a cabo en Mante, al sur de Tamaulipas, la detención de tres presuntos integrantes de Los Zetas: entre los detenidos se encuentra Ricardo Iván Santillán Trejo, otro de los blancos principales definidos dentro de la nueva estrategia de seguridad en Tamaulipas.
"El detenido de 29 años de edad, asumió el mando en Mante y en Hidalgo. El domingo, personal de infantería de la Marina ubicó dos camionetas con sujetos armados, que fueron detenidos: Cesar Ruiz Torres, Bairon Alan Rodrígue Zúñiga y Ricardo Iván Santillán Trejo", mencionó Rubido García.
Los tres detenidos en Tamaulipas fueron trasladados a las instalaciones de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) de la Procuraduría General de la República (PGR), para ser puestos a disposición del Agente del Ministerio Público de la Federación.
El gobierno federal anunció el 13 de mayo en la ciudad de Reynosa un despliegue mayor de fuerzas federales y la depuración "completa" de las instituciones de seguridad en Tamaulipas, que sufre desde hace varias semanas un recrudecimiento de la violencia del crimen organizado.
Tamaulipas ha sido por años escenario de violentos choques entre el Cártel del Golfo y Los Zetas, que se disputan un territorio clave para sus negocios ilícitos, entre ellos el trasiego de drogas y armas, el secuestro y la extorsión.